Un comisario general retirado de 54 años fue víctima de un robo cuando, luego de un viaje familiar, regresó anteanoche a su vivienda de barrio Fisherton. El policía estacionó su vehículo en la puerta de su casa y, cuando se disponía a guardarlo en la cochera, fue sorprendido por dos hombres y una mujer que, a punta de pistola, lo amenazaron de muerte y lo obligaron a ingresar a la propiedad junto con su familia. Los ladrones se alzaron con un jugoso botín, compuesto por artefactos electrónicos y armas de fuego.
De acuerdo con los investigadores del caso, la víctima fue Rodolfo Romero, un policía retirado de 54 años que supo estar a cargo de la Brigada de Homicidios y de la Agrupación Unidades Especiales de la Unidad Regional II, y fue jefe de la UR XI del departamento Las Colonias.
Según los pesquisas, anteanoche el ex uniformado regresó de unas vacaciones junto a su mujer, de 53 años, y su hijo de 25. Cerca de las 21, la familia llegó a la puerta de su casa, ubicada en Donado al 500 bis, en barrio Fisherton. Fue en ese momento, justo cuando Romero se disponía a guardar el auto en la cochera, que tres personas armadas –dos hombres y una chica–, se acercaron al auto, redujeron a la familia e ingresaron a la vivienda.
Una vez dentro de la casa, los asaltantes encerraron a la familia dentro de un baño y, luego de revolver todas las habitaciones en busca de objetos de valor, se alzaron con un importante botín. De acuerdo con la denuncia realizada en la comisaría 17ª, que tiene jurisdicción en la zona, los asaltantes se llevaron 3 notebooks, una cámara digital, una tablet, una filmadora, un equipo de audio, un reproductor de DVD, los celulares de las víctimas, algunos efectos personales, y tres armas de fuego: una pistola calibre 9 milímetros, un revólver calibre 38 y otro calibre 32, sostuvieron los voceros.
Según las fuentes, la familia permaneció encerrada hasta que no se oyeron más movimientos en la casa. Al corroborar que los asaltantes ya se habían dado a la fuga, las víctimas salieron del baño y dieron aviso a la seccional policial ubicada a 7 cuadras de la vivienda. Los pesquisas presumen que se trató de un robo al voleo y que los ladrones no conocían la identidad de Romero.