Por Patricia Dibert
Una terraza coronada por una cúpula, un gran comedor de hotel con estufa a leña y ventanas importantes. El viejo edificio de La Lavardén se transforma y se recupera para todos. Un espacio público de mil metros cuadrados de gente creando, convertido en un complejo cultural en movimiento, que abrirá sus puertas el próximo miércoles a las 18:30, en la tradicional esquina de Sarmiento y Mendoza. El nuevo complejo cultural comprende entre otros espacios, las Bodegas de Diseño y Producción que están en los subsuelos, La Sala de las Miradas en la planta baja, La Galería de los Roperos en el 1º piso, el proyecto Cuartos Crecientes en el 2º Piso, El Gran Salón en el 5º piso y una Terraza todavía en recuperación en el 6º Piso.
Una de las novedades de Plataforma Lavardén es El Gran Salón, que era antiguamente el comedor del Hotel de la Federación Agraria que funcionaba en el edificio al momento de su construcción; un gran espacio donde podrán programar milongas y bailes, además de conciertos íntimos.
El Director Provincial de Proyectos Estratégicos del Ministerio de Innovación y Cultura, el actor Gerardo Agudo, adelanta que en ese gran salón ubicado en el quinto piso del edificio, se podrán programar seminarios del cuerpo, proyecciones, ferias de diseño, conciertos, café concert, danzas y milongas, como las que se programaron para este fin de semana y hasta una fiesta de Swing con la impronta de los años 40’.
“La programación de este importante Salón del 5 piso de la Plataforma Lavardén comienza con un concierto el próximo jueves del Mono Fontana y Alejandro Corvalán, con “Canciones de Ruidos de Magia”, donde estará como invitado el rosarino Claudio Cardone, con un repertorio muy vinculado con Spinetta”, aclara Agudo sobre la propuesta de los músicos ex integrantes de grupos de Luis Alberto Spinetta. En ese espacio se ha programado una gran agenda de actividades, como el sábado el concierto de Julieta Rada presentando su CD “Afrozen”, junto a un seleccionado de músicos uruguayos.
Uno de los espacios más bellos de la Plataforma Lavardén es la Azotea, una terraza coronada por la vieja cúpula del edificio, que será recuperada totalmente para la llegada de la primavera, con la idea de generar un lugar al aire libre para conciertos y momentos de descanso ‘con un café y cerca del cielo’, según la definición de Agudo.
–¿El edificio ofrece otro gran espacio además de El Gran Salón?
–En la planta baja inauguramos el bar El Cafetín, y detrás hay un ambiente grande, que llamamos La Sala de las Miradas, aunque tenemos la intención de que no sea un salón exclusivo de una determinada actividad de arte, sino que se pueda utilizar para muestras, ensayos o conciertos, y que se pueda ir transformando de acuerdo a las necesidades. En el mes de la inauguración esa sala de la planta baja, tendrá un “Homenaje a Oesterheld y a la historieta argentina”, que se enmarca en el Festival Crack Bang Boom! En ese mismo espacio se podrá ver desde el 23 de agosto “Pidamos peras a Jorge Álvarez”, que es una muestra que se exhibió en la Biblioteca Nacional y La Sala de las Miradas es su primer destino en el interior. En ella el pionero del rock y editor de muchos libros importantes, además de creador del Sello discográfico Mandioca, muestra en fotos, textos y afiches, su trabajo de muchos años, por el que Jorge Álvarez es considerado un verdadero cazador de talentos.
–Desde el exterior no se toma conciencia del sótano, ¿Qué proyectos abarcará ese gran SUM?
–Será un subsuelo dedicado a la creación de talleres, con espacios determinados para talleres de carpintería, herrería y vestuario. Es un gran subsuelo que abarca todo el edificio, donde una parte es une espacio performático para experimentación, y otra destinada a los talleres, donde queremos que la gente los visite en esta primera etapa, y donde los grupos teatrales podrán confeccionar el vestuario de las obras que realicen, y también pata tomar clases de perfeccionamiento o aprender todos los trayectos pedagógicos que tengan que ver con la construcción.
–¿Cuál es el espacio que considerás una curiosidad de este proyecto?
–En el primer piso se rescató una galería con 7 puertas, que presentamos como La Galería de los Roperos. Allí mediante puertas antiguas de roperos, se puede acceder a diferentes mundos mágicos. Un salón de lectura, otro ambientado con estética tipo Marcos López para sentarte y tomar mates durante el día, hay otro donde podes acostarte en unas colchonetas grandes con almohadones a escuchar cuentos leídos por Cortázar o Borges y por actores rosarinos, o escuchar música. Otro con documentales y cortos, otro más con una sastrería teatral, hay otro que es un Salón de Rompecabezas, una puerta abre el espacio destinado a un Club de Barrio donde recreamos una cancha de bochas, tiro al sapo, ajedrez. Y la última puerta permite acceder a una calesita mágica, porque dentro de esa habitación hay un carrusel en funcionamiento.
–Los rosarinos siempre vimos el edificio como dos espacios diferentes, uno destinado al teatro y otro a administración, ¿Cómo van a interactuar las dos estructuras del edificio?
–Queremos unificar en este único nombre que es Plataforma Lavardén, donde se puedan vincular todos estos espacios. Ya hicimos algunas experiencias en las últimas semanas. El fin de semana vamos a tener a Javier Malosetti en el Teatro con su banda Electrohope, mientras en el Gran Salón se realizará la Milonga Roja, y en el foyer habrá una exposición, y también puede desarrollarse un ensayo en ese mismo momento en el subsuelo: La idea es que haya cruce de expresiones, porque tranquilamente todo puede convivir.
–¿Cuál será el horario de funcionamiento de la Plataforma Lavardén?
La idea es que funcionen durante todo el día y en los horarios de eventos especiales. En el edificio quedaron las oficinas del Ministerio de Innovación y Cultura, de la Sinfónica Provincial y de Señal Santa Fe, y todos los otros lugares están destinados a toda la puesta.
Para consultar horarios y espacios, se debe acceder a Plataformalavarden.com.ar, donde en breve serán sumados los trayectos de capacitación y formación.