Con el 57 por ciento de la población total, alcanza un porcentaje que incluso lo ubica por encima de la media regional y mundial, del 33 y 24 por ciento, respectivamente, según un informe privado.
La consultora Prince and Cooke reconoce también que uno de los motores para la profundización de la adopción de las nuevas tecnologías por parte de la población, es la «continuidad de los planes de crédito sin intereses para el consumo».
Mencionan, además, la curva de experiencia y aprendizaje de los actuales usuarios de la red y el efecto sobre los nuevos.
Pero Cooke destacó en reiteradas oportunidades la importancia de los «contenidos útiles» para atraer a la gente al uso de Internet.
«El aumento constante de las prestaciones e «inteligencia» de los productos y aplicaciones TIC (tecnologías de la información y las comunicaciones), potenciado por su creciente facilidad de uso y la reducción de precios», indicó.
«La falta de contenidos y aplicaciones masivas, verticales y útiles» es un «limitante» a la expansión de Internet en todo el país y para toda la población.
Agregó que «si bien el entretenimiento será la motivación más importante de los próximos ingresantes al mundo digital, la utilidad (beneficio o ventaja) es un buen factor para sortear la parte económica de la decisión de adopción».
«El modelo de orientación al consumo -insiste el informe privado- ha colaborado en el aumento de la inclusión digital, ya que muchos argentinos han adquirido sus dispositivos de acceso con planes en cuotas sin interés».
De todos modos, la contracara de la expansión de la demanda requiere de «inversiones crecientes en infraestructura y desarrollo de aplicaciones».
Otros factores que aceleran la adopción de las nuevas tecnologías son la movilidad, la convergencia, el desarrollo de la banda ancha fija y móvil, nuevos contenidos, interfases, aplicaciones, y tecnologías de conexión.
El informe identificó también como un factor adicional para el caso de la Argentina, y del que se espera un «gran impacto», a la continuidad y concreción de proyectos en el marco de la Agenda Digital Argentina y El Plan Federal Estratégico de Gobierno Digital.
«Lograr la inclusión, la conectividad de la otra mitad de la gente, la base poblacional, requerirá sin dudas políticas efectivas de inclusión de corto y mediano plazo», consideraron los analistas.
En ese sentido el estudio indicó que pese a tener una penetración por cantidad de usuarios tan alta (57%) también es «muy despareja por regiones o provincias, de modo estrechamente relacionado con el PBI per capita y el nivel socioeconómico».
(Telam)
Como ejemplo de esta situación indicaron que sólo la Ciudad de Buenos Aires y la provincia de San Luis superan al promedio nacional de indicadores.
«El caso de la Ciudad de Buenos Aires es el claro ejemplo de lo que llamamos la inclusión digital por el mercado y la demografía; el de San Luis por su parte, lo es de la inclusión digital por voluntad política y programas estratégicos, integrales y efectivos», agregó.
Hasta ahora los analistas coinciden en señalar que las asimetrías regionales en cuanto a conexiones a Internet tienen que ver con el despliegue de las redes de fibra óptica para dar servicios de banda ancha, y a la competencia que genera mejores precios para los consumidores.