Rosario Central levantó su imagen en el Gigante de Arroyito y derrotó por 3-1 a Atlético Tucumán con una soberbia tarea de su mediocampo. Los goles del conjunto de Miguel Ángel Russo fueron anotados por Diego Lagos, Pablo Becker y el ingresado Héctor Bracamonte, mientras que el ingresado Gabriel Méndez había descontado para la visita. En tanto, en la primera mitad Paulo Ferrari marró un penal.
El nivel exhibido fue bueno y la superioridad del local se extendió a lo largo de todo el encuentro, pero la ineficacia en la definición hizo que el combinado de Russo debiera sufrir de más ante el conjunto de Ricardo Rodríguez.
Lagos aprovechó sobre los 10 minutos del primer período un buen envío de Becker desde la franja derecha para definirlo con un buen disparo con el empeine del pie izquierdo para desatar la locura en el Gigante.
Las ocasiones desaprovechadas se multiplicaban y la posibilidad de romper otra vez la portería de Cristian Lucchetti parecía inmejorable con el penal que le cometieron a Javier Toledo. Sin embargo, Ferrari quiso ubicar su remate en el ángulo y el balón rebotó en el travesaño y salió.
Pese a la expulsión del defensor Líder Mármol, y de contraataque, los tucumanos se hacían sentir aunque sin profundizar con una discreta tarea del exdelantero de Newell’s Juan Manuel Cobelli en el centro del juego ofensivo presentado desde el inicio.
En el complemento, a los 49’ de juego, cuando los equipos recién se rearmaban tras el descanso, volvió a figurar en escena el juvenil Becker, quien eludió a un rival con una finta y definió con zurda al palo más lejano de Lucchetti.
Sin embargo, el descuento del ingresado Méndez a los 69’ hizo temblar las aspiraciones de sumar por tres del elenco de Russo con una fina definición con cara interna para batir por primera vez en la tarde el arco defendido por Mauricio Caranta.
Con una buena tarea de Nery Domínguez en la zona de recuperación, el conjunto auriazul no pasaba sobresaltos aunque defendía atento frente a los constantes intentos de la visita, que no lograba penetrar para generar riesgo.
El propio volante central fue el que logró, con un exquisito pase entre líneas, habilitar a Lagos, quien asistió al recientemente ingresado Bracamonte para la tercera alegría de la tarde-noche en el Gigante, que resultó un nuevo triunfo como local y tres puntos valiosos.
De ese modo, Central quedó con esta victoria con diez puntos en la tabla, a cinco unidades de distancia de los líderes Gimnasia y Esgrima de La Plata e Independiente Rivadavia de Mendoza.
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