La diputada nacional Elisa Carrió involucró directamente al ex presidente Fernando De la Rúa en el pago de sobornos en el Senado para aprobar la Ley Laboral del año 2000, pero no pudo aportar datos que lo comprueben.
Pasadas las 10, Carrió se presentó en el Tribunal Oral Federal 3, donde fue citada para que aportes datos sobre el «affaire», que la llevaron en aquel momento a diferenciarse y luego a romper con su partido, la UCR, de la cual era diputada nacional.
Según trascendió de fuentes judiciales, en su declaración testimonial Carrió dijo que De la Rúa fue quien ordenó pagar coimas con dinero público para obtener la norma, aunque no aportó pruebas concretas. «Si eso se hizo», en alusión al pago de sobornos, «no tengo dudas de que la responsabilidad política fue de Fernando de la Rúa y del Ministro de Trabajo» porque algo así «no se hace sin la orden del Presidente», evaluó.
Además, aseguró que si bien «no le consta» que se hayan pagado sobornos, sí dijo que fue «creíble» la denuncia que hizo el «arrepentido» Mario Pontaquarto porque «así era como funcionaba» la política.
«Hablo de responsabilidades políticas, las hubo, y ameritaba el juicio político del Presidente y del ministro (Alberto) Flamarique», aseguró Carrió, quien aclaró que si se pagaron coimas «las debe investigar la Justicia».
«Yo dije que estaba claro que Fernando de la Rúa ordenó el pago de las coimas», recordó también sobre declaraciones hechas por ella a la prensa en el 2000, pero luego al ser preguntada por las defensas respecto a si tenía alguna constancia de la existencia de los sobornos respondió «no me consta».
Los otros que declaran también este jueves son el exministro del Interior del menemismo Carlos Corach y Vilma Ibarra, asesora en aquel entonces del vicepresidente Carlos «Chacho» Alvarez.
Vilma Ibarra integró el equipo que Álvarez llevó al Senado en 1999 para imponer normas de transparencia y austeridad en el cuerpo, cargo que desempeñó hasta mediados del 2000 cuando fue electa legisladora porteña.
También esta citado por la defensa el entonces senador nacional peronista por Tucumán José Fernando Carbonell, cuyo jefe de bloque, Augusto Alasino, es uno de los cuatro senadores acusados de haber cobrado la coima.
Corach dará su testimonio en último turno, a las 17, citado como testigo dado que entonces era senador porteño por el justicialismo.
Según la acusación fiscal, basada en el testimonio del secretario parlamentario arrepentido, Mario Pontaquarto, De la Rúa habría autorizado el pago de 5 millones de pesos a senadores justicialistas provistos por la SIDE que comandaba entonces Fernando de Santibañez.
También están acusados el exministro de Trabajo Alberto Flamarique, y los entonces senadores del PJ, Alasino, Remo Costanzo, Alberto Tell y Ricardo Branca.