¿Ganó un punto o perdió dos? Esa es la pregunta que quedó flotando por Victoria con el 0-0 consumado. Todos saben que Newell’s vive dos realidades bien diferenciadas. Una suerte de Doctor Jekill y Míster Hyde, propia de estos tiempos de promedios en el fútbol argentino.
Mientras el capitán de Tigre, Martín Galmarini, dijo que se “empató contra el mejor equipo del torneo”; el Tata se mantiene enfocado en los promedios.
Si se lo observa a Newell’s con la mirada de Martino, el punto es bueno. Una cancha difícil y San Lorenzo perdió en la noche del sábado y el equipo sigue sumando.
Si se lo mira con los ojos ambiciosos de un reconocido candidato, por la producción y las posibilidades desperdiciadas, dejó dos puntos en el camino. Más allá de Boca y Vélez, porque Newell’s jugó un muy buen primer tiempo.
Tuvo rotación de pelota, Villalba en gran tarea para cortar y distribuir. Bernardi, de “viejo” estratega, colocando cuatro pelotas a lo maestro, a espaldas de los defensores de Tigre, que Tonso, Maxi Rodríguez y Scocco por dos no pudieron aprovechar.
El juego estuvo y eso debe dejar tranquilo a Martino. Pero faltó contundencia, una de sus principales virtudes. Vélez y Racing asoman en el futuro cercano. Lo que sí está muy claro es que Newell’s puede ganar, empatar y también perderá algún partido. Pero es difícil superarlo en el trámite del partido. Y esa es la rúbrica de Martino.