El ensayo futbolístico realizado ayer en el predio de Arroyo Seco dejó la peor secuela: Pablo Becker quedó casi descartado para el encuentro del lunes ante Independiente Rivavia. Así lo confirmó el médico del plantel canalla, Pablo Colella: “Es muy difícil que llegue. Por más que nos encontremos con una distensión, está con mucho dolor”.
Cuando se disputaba un minuto y medio de la práctica Becker recibió un pelotazo de treinta metros, ahí el juvenil encaró con pelota dominada a Mauricio Caranta y cuando el arquero salió a achicarlo el volante ofensivo lo esquivó y al saltarlo sufrió la molestia. Seguramente la misma lo dejará fuera del encuentro del lunes y habrá que ver si se perderá algún partido más.
“Hizo un movimiento de incoordinación y tuvo sensación de elongación máxima. Vamos a esperar hasta el viernes (mañana) para hacerle un estudio para ver que tiene”, relató más tarde Colella.
Becker quedó tendido fuera del campo de juego y rápidamente se acercó el médico canalla, quien con la ayuda de un colaborador logró ponerlo de pie al juvenil. Al pararse se tomó rápidamente el isquiotibial derecho y caminó lentamente hacia uno de los bancos de suplentes de la cancha principal del predio.
“La zona donde sufrió la elongación máxima es en el isquiotibial tercio medio de la pierna derecha”, finalizó el facultativo auriazul.
El hecho de realizarle un estudio por imágenes recién en la jornada de mañana lo deja sin chances para el lunes. Pero más allá de eso desde el cuerpo médico no quisieron descartarlo, ya que aguardarán el resultado del estudio para dar más precisiones de la lesión muscular.
La tradicional práctica de fútbol de cada semana no arrojó certezas en cuanto al equipo que saldrá el lunes a la cancha, pero sí dejó la peor noticia de todas: el jugador más desequilibrante del equipo de Miguel Ángel Russo quedó con un pie y medio afuera del partido del lunes.