Vecinos de barrio Las Flores interrumpieron durante nueve horas los ingresos a la planta de residuos municipal, ubicada en la zona sudoeste de la ciudad, “ante la falta de respuestas” de la Municipalidad sobre el pedido de siete colectivos para trasladar a mujeres de distintos barrios a la edición Nº 27 del Encuentro Nacional de Mujeres, que se desarrollará desde mañana en Misiones. El reclamo –que sorprendió a los interlocutores– se enmarcó, sin embargo, en una jornada de protesta convocada por distintas organizaciones sociales –Coordinadora de Unidad Barrial-Movimiento Teresa Rodríguez, Corriente Clasista y Combativa, en la Federación de Organizaciones de Base y otras– que recorrió ayer organismos del municipio, la provincia y la Nación para denunciar “el creciente aumento del hambre” y “el agravamiento de las condiciones de vida” en las zonas más pobres de la ciudad.
Tras una mediación a cargo de responsables de la Secretaría de Promoción Social municipal, área que recibirá hoy por la mañana a los vecinos, el piquete se levantó sin la subvención esperada por los manifestantes y con una denuncia judicial contra ellos.
La protesta, que resintió en dos de sus tres turnos el servicio de recolección de residuos, se plantó desde las 7 de ayer, cuando militantes sociales del barrio Las Flores –que aseguraron mantener un comedor y una copa de leche en esa zona “sin ningún tipo de subsidio estatal”– prendieron una fogata en el camino que lleva a la puerta de la planta de residuos ubicada en Presidente Perón al 8100.
En diálogo con El Ciudadano, Vilma, quien dijo formar parte de una agrupación con asiento en distintos barrios de la ciudad –Las Flores, La Paloma, La Lagunita–, contó que hace tres meses presentaron al municipio una solicitud para que el gobierno local colaborara con siete ómnibus y gastos por viáticos destinados a trasladar al menos 140 mujeres rosarinas a Misiones, donde mañana comenzará el 27º Congreso Nacional de Mujeres. “Es muy importante para las mujeres de los barrios asistir, poder hablar de sus problemas y ver cuáles son las soluciones”, explicó Vilma ante la mirada del personal de Guardia Urbana Municipal, que desde temprano custodió la protesta.
A pesar de que aseguran haber transitado los canales diplomáticos habituales, la agrupación no recibió respuesta oficial, y desplegó la protesta en zona oeste, parte de una movida mayor, que ayer recorrió la plaza San Martín, frente a la sede de Gobierno de la provincia, la plaza 25 de Mayo frente al Palacio de los Leones y la delegación local del Ministerio de Trabajo de la Nación y la Ansés, en Sarmiento y Rioja.
Frente a la planta de avenida Juan Domingo Perón, los manifestantes bloquearon totalmente el ingreso a todos los vehículos, salvo a los de los recolectores informales que llegaban hasta el predio de Bella Vista.
El bloqueo se mantenía a las primeras horas de la tarde, cuando desde la Municipalidad emitieron un comunicado por el cual calificaron como “desproporcionada” la medida de fuerza y confirmaron que la Dirección de Asuntos Jurídicos, de la Secretaría de Gobierno, había realizado una presentación judicial ante el fiscal en turno. En la denuncia, el Ejecutivo pidió a la Justicia “arbitrar los medios” para desactivar la protesta, al entender que provocaba “una interferencia en un servicio público vital como el de la recolección y disposición de los residuos domiciliarios de la ciudad”.
Finalmente, la protesta se desactivó pasadas las 15 por la vía de la negociación: consultada por el cese de la medida, Vilma aseguró que levantaron la medida bajo la promesa de la reunión que hoy mantendrán con autoridades de Promoción Social en las oficinas de esa repartición. Sin embargo, admitió la manifestante, no contarán con los ómnibus que solicitaron.
