Por Miguel Passarini
El ámbito de la cocina refiere a ese lugar donde la mezcla de una serie de elementos genera un plato que luego será degustado por un potencial comensal que, en definitiva, será quien juzgue la habilidad y el talento del cocinero. Partiendo de esa premisa, desde hace algunos años, un equipo de artistas rosarinos vinculados con el quehacer teatral, que incluye dramaturgos, actores y directores, lleva adelante La cocina de los dramaturgos, proyecto que, a su vez, tiene su antecedente en Buenos Aires.
Esta noche, a las 21, en Bienvenida Casandra (Sarmiento 1490) se pondrá en marcha la novena edición de La cocina de los dramaturgos, proyecto que en la actualidad cuenta con la coordinación general de la dramaturga y directora Griselda Centini e involucra a diez dramaturgos, otros diez directores y una treintena de actores.
“Este año, las funciones tendrán lugar jueves, viernes y domingos de octubre, y se trata de diez obras breves que mostraremos agrupadas entre tres y cuatro cada día. En total, son diez obras de humor: tres los jueves, cuatro los viernes, y tres los domingos. Y es para destacar que este es el noveno año consecutivo que se lleva a cabo, con gran acogida del público tanto de la ciudad como de la zona”, adelantó Centini a El Ciudadano.
Los jueves se verán El club de mis amores de Susana Galván, La mujer del vidriero de Osvaldo Bordone y Marambio… tenemos un problema de Luis María Fittipaldi. Los viernes será el turno de Un tren a alguna parte de Nicolás Jaworski, La decisión del día de Facundo Martínez, La teoría del huesito de Alicia Salinas, y Un rato con el ratón de Rodolfo Rivas. Finalmente, los domingos será el turno de Esencial de Doris García, El mal de la ciudad de Claudio Moda y Así en la vida como en el panteón de la propia Centini.
“El ciclo, único en su tipo en la ciudad y uno de los pocos en el país, nació en 2004 por iniciativa de un puñado de dramaturgos, socios de Argentores, con la inquietud de hacer algo en conjunto; así se nos ocurrió tomar este formato porteño y recrearlo acá. Las primeras ediciones se hicieron en La Nave, y luego, desde hace cuatro años, pasamos a La Esquina del Negro. En 2012, el ciclo se sube al escenario en Bienvenida Casandra, lugar donde se puede cenar o picar algo mientras se disfruta del espectáculo”, agregó Centini.
Finalmente, la directora refirió la novedad de la presente edición: “Este año, tendremos cada noche un invitado especial, alguien del quehacer teatral al que reconoceremos por su trayectoria y aporte al teatro, y distinguiremos con un galardón de «cocinero»”.
