Las mujeres jóvenes que son madres esperan recibir este domingo como regalo “un objeto de uso personal exclusivo”, mientras que aquellas que ya peinan canas se contentan con celebrar su día con “valores afectivo-emocionales”. En tanto, a la hora de elegir un obsequio se busca satisfacer el deseo personal de la mujer, y ya no se hace un regalo “para compartir” o “de uso familiar”, con lo cual se rompe el estereotipo de “madre-mujer” abocada únicamente a los intereses familiares. A esta conclusión llegó el Instituto Municipal de la Mujer, que junto a la Secretaría de la Producción y Desarrollo Local realizó una encuesta en centros comerciales a cielo abierto de la ciudad a mujeres y varones “con el objetivo de visibilizar a la mujer, más allá del rol estereotipado de la maternidad, para contribuir a desandar el camino que ha reducido históricamente a las mujeres a un lugar determinado”.
Se realizaron 1.317 consultas en total: 1.065 a mujeres y 252 a varones en diferentes centros comerciales de la ciudad: peatonales Córdoba y San Martín, avenida Pellegrini, Fisherton, Echesortu y Alberdi. Los interrogantes planteados fueron qué creen que desean las madres que se les obsequie este domingo y a quién se le hará un obsequio.
Este relevamiento dio como resultado que las mujeres de entre 24 y 40 años esperan recibir un “objeto de uso personal exclusivo”, mientras que aquellas de entre 41 y 55 y las que tienen más de 55 años expresaron que “el deseo de las madres está íntimamente relacionado con los valores afectivo-emocionales“.
“Se observa que en las mujeres mas jóvenes hay una marcada tendencia al deseo de recibir obsequios más relacionados con sus gustos personales que a los delineados por una construcción social de la maternidad más tradicional, mientras que las franjas de mayor edad expresan con más claridad el deseo de recibir obsequios que expresen valores afectivo-sentimentales, tales como amor, cariño, besos, reunión familiar, la presencia de los hijos, etcétera”, analizaron desde el Instituto Municipal de la Mujer.
¿Qué dijeron los varones ante la pregunta de qué pensaban regalar este domingo? El resultado fue similar: los más jóvenes anunciaron que pensaban regalar objetos de uso personal, mientras que los de más edad se inclinaron hacia lo afectivo-emocional.
“En las franjas de mayor edad, tanto en mujeres como en varones, es más visible una construcción más tradicional sobre lo que atañe a los regalos que pueden desear las madres, ya que es más observable la articulación con los aspectos afectivos que de algún modo actúan como traductores de los elementos asociados a la maternidad tales como el amor, la unión de la familia, la presencia de los hijos, así como su tranquilidad y bienestar. Mientras que en las franjas de menor edad se visibiliza un tránsito hacia la figura de la mujer que cumple un rol materno entre otros, por lo tanto la posibilidad de recibir un obsequio está mucho más relacionada con el desempeño, gustos y placeres propios de la persona. Así aparecen regalos como indumentaria, accesorios, un día de spa o un viaje”, sostuvieron desde la repartición municipal.
Asimismo, la mayoría de las mujeres consultadas aseguraron que les harán regalos a sus “madres, abuelas y suegras”. En tanto que los varones, si bien en mayor medida les entregarán obsequios a sus madres, los que se encuentran en la franja etaria de 25 a 40 años reconocieron que también agasajarán a las madres de sus hijos.
“Se evidencia que la mayoría de las mujeres contempla a un amplio abanico de destinatarias, reafirmando así el papel de ‘encargada’ de recordar el día de celebración”, indicaron desde el Instituto Municipal de la Mujer.
Esta encuesta permite concluir que “es muy baja la mención de artículos para compartir o de uso familiar tales como electrodomésticos o adornos para la casa”, con lo cual se puede inferir que “a través de este agasajo particular ya no se encasilla a la mujer-madre sólo en el seno familiar, sino que al tener en cuenta sus actividades, gustos y preferencias, se la puede visibilizar fuera de su ámbito diario, teniéndose así una visión integral de la mujer y no sólo estereotipada en un rol”.
