Personal policial recuperó varios elementos que habían sido sustraídos el pasado jueves durante los saqueos en Bariloche, en tanto el gobierno de Río Negro confirmó que indemnizará a los pequeños y medianos comerciantes afectados.
A través de diversos allanamientos realizados por la policía con el acompañamiento de gendarmaría, los efectivos recuperaron electrodomésticos, comestibles y otros artículos, además de un vehículo secuestrado, informó la prensa local.
Con la autorización del Juzgado de Instrucción 6, a cargo en subrogancia de Ricardo Calcagno, el subcomisario Jorge Elizondo explicó que se desarrollaron unos 20 operativos en distintos barrios de los alrededores de la ciudad turística.
«Estamos trabajando apenas sucedieron los hechos. Se van a continuar allanando domicilios para poner en mano de la justicia los elementos sustraídos en los distintos comercios. Queremos llevar tranquilidad y demostrar que el Estado está presente, nos estamos ocupando y estamos preocupados por devolver la tranqulidad a la población», señaló a Radio Seis el subjefe de la Policía de Río Negro, Roberto Stupniki, que participó de los allanamientos durante el fin de semana y este lunes por la mañana.
En los lugares se secuestraron elementos como ropa, comida, bebidas, elementos de perfumería y electrodomésticos que están siendo acopiados en la Escuela de Policía para ser puestos a disposición de la Justicia y ser entregados a los propietarios, informaron medios de prensa locales.
Por otra parte, el ejecutivo rionegrino confirmó que indemnizará a los pequeños y medianos comerciantes afectados por los saqueos en Bariloche: la Agencia de Recaudación Tributaria se contactará con los damnificados para iniciar el inventario correspondiente.
El resarcimiento podrá alcanzar hasta los 30.000 mil pesos, dependiendo de cada caso y las pérdidas sufridas, incluyendo reparación de daños materiales en los edificios de los comerciantes y al financiamiento para la recuperación del capital perdido.
En el primer conteo se calcularon poco más de 30 empresas pequeñas y medianas dañadas, principalmente en la calle Onelli y en los barrios del Alto.
