Integrantes del Movimiento Giros se movilizaron ayer por la mañana a los Tribunales provinciales para recusar por falta de imparcialidad a la jueza de Circuito Nº 5 Stella Bertune y presentar una revocatoria contra su última decisión, que ordena el desalojo definitivo del tambo La Resistencia, situado en el barrio Nuevo Alberdi. Estos son los últimos caminos legales que les queda recorrer para frenar el desalojo. Por fuera de lo judicial, Giros apuesta a una resolución de índole política con un proyecto en la Legislatura para expropiar los terrenos en disputa. En ese sentido, entre hoy y el lunes se reunirán con representantes de los ministerios de Justicia y de Desarrollo Social santafesino con quienes ya habían iniciado una mesa de diálogo.
Si bien desde Giros ayer apuntaron que el 28 de febrero serían desalojados, la jueza Bertune se mostró extrañada por estas aseveraciones. Según explicó la magistrada, Giros aún no ha sido notificado del fallo. Esto significa que todavía no corren los 15 días hasta la aplicación de la medida. Además, existe una instancia más: la apelación. Fuentes judiciales indicaron que por estas razones no se puede poner fecha definitiva. Sin embargo, los integrantes del movimiento social con asiento en el noroeste de la ciudad presentaron una recusación en la mesa de entrada del juzgado a cargo de Bertune. Es una forma de “abrir el paraguas”. La misma fue radicada, según señalaron desde Giros, por supuesta falta de imparcialidad en el fallo que beneficiaría al empresario Mario Jáuregui, quien se presentó a reclamar el predio en condición de propietario. Esta presentación fue acompañada de un documento de carácter informativo sobre la vigencia de la ley provincial 13.334, que suspende por el plazo de cinco años cualquier desalojo de campesinos en todo el territorio santafesino. La prisa de Giros para interponer estos recursos fue motivada por la noticia de que Jáuregui habría presentado una garantía en el marco de una posible apelación. Esto permitiría al Poder Judicial llevar adelante la medida de desalojo aunque el litigio no haya terminado y se falle a favor de Giros. Así, los daños ocasionados por la aplicación del desalojo podrían ser resarcidos con el dinero de la garantía.
En diálogo con El Ciudadano, Juan Monteverde, referente de Giros, señaló que a pesar de los esfuerzos no depositan muchas esperanzas en las resoluciones judiciales, por lo que prefieren apostar a la resolución política. Hace una semana, y por orden del gobernador Antonio Bonfatti, integrantes de la organización fueron recibidos por los ministros de Desarrollo Social, Mónica Bifarello, y de Justicia, Juan Lewis. Con ellos se formó una mesa de diálogo. Por esta razón, Giros destacó el cambio de actitud de la provincia y la apertura del debate. Desde el movimiento social adelantaron que resistirán el desalojo. Cabe agregar que existe un proyecto de ley presentado por los diputados Eduardo Toniolli y Oscar Urruty en noviembre pasado para pedir la expropiación del tambo. El mismo contó con el aval de dos tercios de los legisladores provinciales pero no llegó a tratarse sobre tablas en 2012. Los integrantes de Giros confían en que si el gobernador decide mandarlo en el período de sesiones extraordinaria pueda aprobarse el proyecto.
Cabe recordar que para peticionar por la inclusión del proyecto en las sesiones, Giros instaló un acampe a fin del año pasado frente a la sede local de Gobernación. Para Giros el desalojo implica “perder la mayor unidad productiva del territorio, las viviendas containers de muchos vecinos, la cadena láctea (dulce de leche, quesos y leche) integrada por productos muy económicos” para el consumo familiar. “Sería entregar 250 hectáreas de Nuevo Alberdi”, completaron.
