La mandataria Cristina Kirchner explicó que decidió regresar a Buenos Aires y no participar mañana del acto central en Caracas por el sepelio de Hugo Chávez por tratarse esta de una actividad «protocolar», cuando ella fue a despedir «no a un Presidente, sino a un amigo y compañero».
«El acto protocolar para Presidentes será el viernes. Les aviso que en esta ocasión lo mío no es protocolar y me iré el jueves. No vine a despedir un Presidente, sino a un compañero y un amigo», argumentó la mandataria, quien fue una de las primeras en viajar a Caracas para acompañar a la familia de Chávez poco después de anunciada su muerte, el pasado martes.
Al respecto, destacó que Chávez fue «el mejor amigo que tuvo la Argentina cuando todos le soltaron la mano, le guste a quien le guste».
La jefa de Estado se pronunció así mediante Twitter, donde escribió una suerte de crónica de su estadía de 48 horas en el marco de las primeras jornada del multitudinario velatorio de Chávez.
«Tango 01. El martes pasado ni bien me avisaron lo de Hugo decidí viajar de inmediato a Caracas. Florencia me acompaña. No podía esperar. Infinita tristeza: nuestro compañero, el amigo de Argentina, había emprendido la partida. Al menos, eso creí», arrancó escribiendo la mandataria.
«Llama Evo, pregunta cuando viajo: ya! Le noto la voz muy triste. Llama Pepe, pregunta si vamos juntos. Claro. Viene con su compañera Lucía», añadió en referencia a su par uruguayo Mujica y su esposa, la senadora Topolansky.
Y prosiguió su relato: «Miércoles al mediodía. Veo a Evo acompañando a Hugo, Nicolás y todo el Gobierno en medio de una marea roja y tricolor. Pepe me dijo en el avión, cuando viajábamos, que no recordaba en la historia un gobernante tan generoso. Cómo me gustaría estar ahi!. No puedo, el calor, mi hipotensión crónica y el médico me lo prohíben».
«No aguanto más en el hotel, voy a esperarlo a la Academia. Luego de horas finalmente llega. En la entrada, un tumulto indescriptible. Pido permiso a los soldados y subimos con mi hija a un banco de madera para verlo llegar. Cuánto dolor. Siento que me alcanzan otros momentos», añadió.
Sobre el momento en el que hizo la guardia de honor junto al féretro señaló: «Cuando hacemos con Evo, Pepe y Lucía la primera Guardia de Honor del Féretro, no lo miro. Sólo quiero recordarlo vivo. Porque está vivo».
«Lo compruebo definitivamente el jueves por la mañana. Cuando miles y miles comienzan a acercarse a la capilla ardiente. Niños, mujeres, hombres, jóvenes, ancianos, discapacitados, soldados, trabajadores, médicos, docentes, familias. SU VENEZUELA», enfatizó.
Y agregó: «Este hombre les abrió la cabeza. Ya nadie se las podrá cerrar, jamas. Vive y vivirá en cada venezolano y venezolana que dejó de ser invisible y se tornó protagonista. Otra vez la marea roja y tricolor que grita: Queremos ver a Chavez! Repiten una y otra vez. No les dije? Chávez Está Vivo. Para siempre».