En los últimos años varias verdulerías de la ciudad de Rosario empezaron a animarse a vender toda una serie de productos que hasta hace un tiempo eran poco conocidos e inusuales. Desde la ya instalada palta, pasando por el plátano y la chirimoya, se apilan en las góndolas de la ciudad toda una serie de víveres exóticos. Una mezcla de turistas, residentes extranjeros y el boom de programas culinarios son los principales motivos de su incorporación al mercado local.
Luis Baroni es verdulero desde hace 47 años, empezó con su papá desde chico y hoy es dueño de un local ubicado en Santa Fe al 1500 que, en sus palabras, es definido como “surtido”. Según el verdulero muchos de estos frutos circulan desde hace varios años pero en los últimos se incrementó mucho la demanda: “Vienen muchos turistas que visitan la ciudad y compran estos productos, también hay extranjeros que viven por acá y buscan cosas típicas de su país”. Uno de los casos es el del plátano que, a diferencia de la conocida banana que se consume en Argentina, es una verdura que se cocina de distintas formas y que es muy demandada tanto por colombianos, peruanos y bolivianos.
Además, el verdulero agrega que la explosión de programas del estilo de “elgourmet.com” hizo que “la gente aprenda cosas nuevas para hacer y se anime a comprarlas y probarlas”. Aunque Luis es un gran conocedor de infinidad de variedades y usos posibles, reconoce que no es un consumidor de los mismos, “pero aprendo y tengo que saber cómo son y cómo cocinarlos para poder decirles a los clientes”, subraya.
“Todos estos productos son difíciles de conseguir y su venta no es segura, son de temporada y muchas veces no se venden, pero a mí me gusta arriesgar y tener variedad de cosas siempre”, cuenta Luis y agrega que entre las especies que se pueden encontrar están los mencionados plátanos, guayabas, papayas, maracuyá, guanábana, chirimoya, entre varias otras. “La chirimoya se busca mucho ahora porque es anticancerígena y la gente averigua y la pide, antes pasaba con el kiwi que era más extraño y ahora ya está instalado”
José, verdulero de oficio, trabaja en el rubro desde los 7 años y hace 35 tiene un local en Mendoza al 1400: “Los productos que están de moda yo hace 25 años que los vendo”, afirma el comerciante que especializó su negocio en frutas y verduras “gourmet”, y agrega: “Yo nací antes que las escuelas de cocina, así que cuando éstas surgieron me venían a preguntar a mí por productos que yo ya conocía”.
Para el verdulero, la mayoría de las personas que buscan frutos y verduras exóticas son personas a las que les gusta cocinar y también viajar: “Prueban algo de viaje que les gustó y vienen a buscarlo al local, como los limoncitos para la caipirinha y muchas cosas más. También hay muchos extranjeros buscando sus productos de origen. Ahora hay mucha migración de todos lados y eso trae más demanda”.
Coincidiendo con Luis, José afirma que incursionar en frutas y verduras exóticas es una apuesta: “Es un riesgo porque son artículos precederos exclusivos. Yo los voy probando y trayendo a ver si salen y hay veces que se vende mucho y otras que no y se te pudre”.
Según el verdulero si bien es cierto que en los últimos años aumentó el conocimiento de estos insumos también creció considerablemente el número de verdulerías por lo cual hay mucha competencia. En su caso ser “garantía de exclusividad en productos” es la forma de “sobrevivir”.
El comerciante tiene, además un historial de proveedor de catering de grandes personalidades como la Reina Sofía, el Príncipe de Borbón y varios mandatarios internacionales. A su vez, tiene clientes como publicistas, fotógrafos, diseñadores que lo contactan por determinados insumos para campañas: “Vienen acá porque saben que encuentran cosas buenas, me piden algo y yo sé donde conseguirlo”.
Ambos verduleros concuerdan en que si bien muchos productos se cultivan en el país, la mayoría son importados y que en los últimos tiempos se ha vuelto difícil conseguirlos.
Además de los frutos tropicales mencionados anteriormente, se pueden encontrar hoy en muchas verdulerías de la ciudad hierbas aromáticas, chiles, diversos tipos de hongos frescos y disecados o los frutos del bosque como moras, frambuesas y arándanos que comenzaron a ser producidos en la región y se encuentran de manera accesible. Pero también se destacan variedades extrañas de verduras y frutas ya conocidas como las berenjenas “espaguetis” o diversas versiones en “babys”, es decir pequeños puerros, zanahorias, remolachas, espárragos, entre otros. Asimismo, del norte argentino llegan los tradicionales papines con diferentes colores y usos, así como las habas y arvejas frescas que son cada vez más vistas.
