Tres hombres vestidos como de policías se presentaron ayer a la madrugada en la galería Victoria Mall, engañaron al personal de seguridad para que les franqueara el ingreso y luego de reducirlo vaciaron una parte de la vidriera de la joyería Marcella Piessa, ubicada en el local 14 del paseo comercial de Córdoba y San Martín. Hasta anoche, los investigadores no contaban con el monto estimativo de lo robado, sólo la descripción de los objetos (relojes de metal, anillos y aros de oro). Fuentes del caso indicaron que los asaltantes se llevaron la CPU del local en donde se almacenan las imágenes de las cámaras de seguridad que posee la joyería, y también la computadora que tiene el personal de la empresa de vigilancia privada en medio de la planta baja, aunque los asaltantes no tuvieron en cuenta una cámara que el municipio colocó en la esquina de las peatonales, donde se pudo apreciar el ingreso del trío de personas vestidas con ropas de fajina negra y chalecos antibalas.
Según fuentes policiales, el hecho se conoció alrededor de las 4 de ayer cuando los uniformados recibieron una comunicación que alertaba sobre un asalto en el interior de la galería Victoria Mall, que tiene entrada por ambas peatonales, Córdoba y San Martín, en pleno microcentro rosarino.
“El vigilador del edificio que cuenta con un paseo comercial en la plata baja y cuatro pisos de oficinas privadas relató que se presentaron tres hombres, vestidos con ropas policiales, golpearon las puertas de vidrio corredizas por San Martín y le dijeron que necesitaban entrar porque habían sido alertados de que una alarma silenciosa de las oficinas del tercer piso se había disparado. La víctima les creyó y los hizo entrar por Córdoba”, describió un pesquisa.
Una vez en el interior de la galería, uno de los falsos policías extrajo un arma de fuego, amenazó al vigilador, de 24 años, lo hizo tirar al piso boca abajo y ató sus manos con precintos.
Mientras el asaltante apuntaba a la víctima, los restantes forzaron la reja que protege la joyería Marcella Piessa en el local 14, rompieron la parte de la vidriera que está del lado izquierdo del ingreso al comercio y se llevaron todos los elementos que estaban en exposición, reconstruyeron los uniformados.
“El propietario de la relojería y joyería no brindó la cantidad como tampoco el valor estimativo del botín. Sin embargo, el dueño aclaró que no era importante porque los relojes sustraídos eran de metal y reparó que como el hueco no era muy grande no se llevaron gran cantidad de anillos y aritos de oro”, continuaron los investigadores.
Además de los elementos de valor, los ladrones también se llevaron la CPU de local donde se almacenan las imágenes de las cámaras de seguridad que posee el interior de la joyería.
Por su parte, una persona allegada al caso agregó que el trío también se llevó la computadora que tiene el personal de la empresa de vigilancia privada, sobre una mesa en el medio de la planta baja, donde se guardan registros de las demás cámaras de seguridad que posee el paseo comercial.
De acuerdo con la investigación, en las imágenes tomadas por el sistema de monitoreo de vigilancia de 360 grados que el municipio tiene instalado sobre las dos peatonales se pudo apreciar que los tres hombres estaban vestidos con ropas similares a las que utilizan los empleados de la fuerza, uniforme de fajina negro con borcegos y chalecos antibalas.
El caso es investigado por el Juzgado de Instrucción de la 6ª Nominación junto con la colaboración del personal de la comisaría 2ª, por razones de jurisdicción.