La presidenta Cristina de Kirchner recibe en Casa Rosada a su par de Brasil, Dilma Rousseff, con quien abordarán diversos temas de la agenda bilateral, entre ellos la situación de la minera Vale y el acuerdo para la industria automotriz.
Rousseff entró por el Salón Sur de la Casa de Gobierno, que da a Paseo Colón, donde fue recibida por Cristina y saludada por el gabinete completo. Luego pasaron al despacho presidencial donde mantienen un encuentro bilateral. A medidas que avancen en el diálogo irán convocando a los ministros relacionados con el tema en cuestión para que se sumen al debate.
Trascendió que ambas mandatarias estarían molestas por los escasos avances que hubo en distintos tópicos de integración conversados en las últimas dos reuniones, una de ellas fin de año en el marco de la Conferencia Anual de la UIA.
Uno de los puntos en los que no habría muchos avances es en el acuerdo automotriz. La idea de Cristina y Dilma es trabajar todo el tiempo que demande y de ser necesario, la brasileña se quedará hasta este viernes. La jornada de hoy culminará con una cena en el Museo del Bicentenario, donde harán una conferencia de prensa.
Tanto en Brasil como en Argentina las terminales automotrices son empresas de origen extranjero, explicó la presidente Cristina de Kirchner: «Por eso, es tan importante esta asociación estratégica con Brasil para desarrollar el sector autopartista. ¿Por qué? Porque agrega mucho valor». Continuó explicando que la intención es que Argentina pueda a dar impulso a su sector autopartista y anticipó que este tema lo conversará con Dilma Rouseff en el encuentro de hoy.
«Por eso también parte de la charla va a ser precisamente saber cómo logramos entre argentinos y brasileños seguir consolidando y desarrollando el sector autopartista, que es tan importante porque genera mucho valor», dijo Cristina.
Por su parte, la mandataria brasileña preguntada por los temas a tratar con su par de Argentina aseveró que traerá una «agenda positiva» marcando de esta manera el ánimo negociador con el cual viene. Estará acompañada de numerosos miembros de su gabinete para tratar diversos temas de comercio bilateral que no están exentos de problemas.
«Tenemos una muy amplia agenda con Argentina. Siempre hablamos de todo, el comercio, la inversión, vamos a discutir todos los temas», señaló Dilma a medios periodísticos. «La visita de la presidenta de Brasil se puede extender hasta el viernes», comentaban en Brasil fuentes oficiales. En la Rosada tienen previsto que pueda irse recién después del mediodía del viernes ya que se prevé una jornada de trabajo durante el jueves que culminará con una cena en el Museo del Bicentenario reservándose el viernes por la mañana para cerrar los temas que pudieran haber quedado pendientes.
La presidenta de Brasil llegó acompañada del canciller, Antonio Patriota, los ministros de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior, Fernando Pimentel, de Pesca, Marcelo Crivella, nuevo ministro de Agricultura, Jorge Mendes Ribeiro, quien sustituye a Wagner Rossi, que renunció ante las denuncias que enfrenta por corrupción y la presidenta de Petrobras, María das Graças Foster, entre otros.
Los temas de agenda son numerosos, entre ellos Argentina seguramente insistirá con la promesa de Brasil de otorgar financiamiento por unos 1,5 mil millones de pesos para obras de la línea Sarmiento que cuenta con la participación de la empresa de Brasil Odebrecht.
Como anticipó Cristina los detalles de la nueva Política Automotriz Común (PAC) ocupará buena parte de la agenda bilateral. El acuerdo actual vence a mitad de año y a más tardar en agosto debería comenzar a regir el nuevo. En caso de no lograr cerrar este nuevo pacto, en teoría debería liberarse el comercio bilateral del sector, algo que se descarta en ambos países. Argentina intenta que numerosas empresas autopartistas se establezcan en el país ya que actualmente hay una balanza deficitaria en autopartes.
Uno de los tópicos delicados a discutir es la decisión de la empresa minera Vale de abandonar el proyecto fabricación y el transporte de potasio que deja sin trabajo a unas 6 mil personas entre empleo directo e indirecto. Hoy rige la segunda conciliación obligatoria establecida por el Ministerio de Trabajo que ha frenado estos despidos.
La empresa justificó esta decisión en que los costos de la inversión aumentaron de 6 a 12 mil millones de dólares. En tanto, el ministro de Planificación, Julio de Vido acusó a Vale de haberle solicitado al Gobierno argentino más beneficios impositivos
«No podemos darles 3 mil millones de dólares extras, sin ningún tipo de contraprestación; eso es robar, es un hecho delictivo, y no nos vamos a prestar jamás a expoliar de esa manera a los argentinos, como se lo hizo en la década del noventa, cuando con los bonos basura, violentando la seguridad jurídica, las leyes de la Argentina y de Mendoza», aseveró el funcionario.
Otro tópico que podía generar rispideces era la denuncia de Embraer de haber pagado sobornos en la Argentina para colocar 20 aviones a la empresa Aerolíneas. Pero, la rápida desmentida por parte de la empresa fue bien vista en el Gobierno argentino.
Los empresarios de Brasil vienen manifestando resquemor para invertir en la Argentina. Ya es conocida la decisión de Petrobras de ir liquidando activos y en Argentina sostienen que están bastante avanzadas las conversaciones con el empresario Cristóbal López, aunque la empresa petrolera brasileña desmintió que ya se haya alcanzado un acuerdo.
Otro aspecto que genera más de una fricción entre los empresarios brasileños son las trabas al comercio exterior establecidas por la Secretaria de Comercio, a cargo de Guillermo Moreno. Seguramente Pimentel vendrá con los números del Indec que muestran con claridad cómo han caído las importaciones de Brasil a la Argentina.
Política regional
Las dos mandatarias conversarán seguramente de la posibilidad de incorporar al Paraguay nuevamente en el Mercosur. Paraguay fue excluido del bloque y Unasur debido a la polémica destitución del presidente Fernando Lugo, en junio pasado. Desde el domingo pasado cuentan con un presidente electo democráticamente. Asimismo, las demoras en avanzar en el acuerdo Mercosur y la Unión Europea será otro de los temas a conversar.
Aunque el tema comercial seguramente será para Brasil el eje de las conversaciones. Es que Argentina ocupa el tercer lugar después de China y Estados Unidos de las exportaciones, y las ventas al país cayeron casi un 21 por ciento el año pasado.
Dante Sicca exsecretario de Industria de la Nación y director de abeceb.com afirmó que «no habrá que esperar resultados concretos de esta reunión como una solución al caso Vale por ejemplo».
A juicio del economista, «en líneas generales todo el clima de negocios entre Brasil y Argentina está atravesando una etapa complicada». Sicca señaló que «quizás sólo haya que esperar de esta reunión de las presidentas algunos gestos que busquen una distensión para más adelante encarar los verdaderos desafíos».
Lo cierto es que ambas mandatarias se profesan mucho afecto y en ambas existe la decisión de incrementar el comercio regional.