Un muchacho de 25 años fue condenado a 7 años y 6 meses de prisión por la Justicia al ser hallado penalmente responsable del asalto a un cobrador de tarjetas magnéticas, ocurrido a finales de junio de 2010 en la puerta del Centro Municipal de Distrito Noroeste, cuando junto con un cómplice se alzó con más de 18 mil pesos y ambos huyeron en moto. Tras el atraco, se inició una persecución por barrio Empalme Graneros que incluyó un enfrentamiento con la Policía hasta que finalmente ambos fueron heridos y alcanzados por el personal policial. Su cómplice murió tras casi 12 horas de agonía en el hospital Eva Perón de Granadero Baigorria, mientras que el ahora penado estuvo internado algunos días en el Hospital de Emergencias por impactos de bala en la espalda y la cara, y una fractura en la pierna, y luego fue trasladado a la Alcaidía Mayor.
El caso se conoció cuando el ahora condenado, identificado como Edgardo Jesús Amarilla, de entonces 22 años, cayó baleado junto con su cómplice, Daniel Alberto Rostro, de 33 años, cerca del mediodía del lunes 28 de junio de 2010, después de ser perseguidos durante varias cuadras por la Policía por distintas calles de Ludueña y Empalme Graneros.
Según reconstruyeron los pesquisas, Amarilla conducía una moto marca Motomel 150 color negra con Rostro como acompañante y aumentaron la velocidad para saltarse un control policial que personal de la comisaría 20ª realizaba en la rotonda de Juan José Paso y Provincias Unidas. Los uniformados comenzaron a perseguirlos, y a la altura de Génova y Bolivia comenzó un tiroteo entre motociclistas y uniformados. Tras la balacera, los sospechosos continuaron su marcha mientras arrojaban gran cantidad de billetes a su paso. La huída tuvo su culminación en Colombia y Génova, cuando la dupla se cayó de la moto producto de los plomos que habían impactado en los cuerpos tras el enfrentamiento con los policías, siempre según el fallo.
El imputado fue trasladado al Hospital de Emergencias con un tiro en la cadera derecha, otro en la cara y una fractura en la pierna derecha. Mientras que Rostro fue derivado al hospital Eva Perón de Granadero Baigorria con un disparo con entrada en la zona lumbar derecha y salida en el lado izquierdo del tórax, otro en el muslo y un tercero en el tobillo derecho para fallecer alrededor de las 23 de ese mismo día como consecuencia de las lesiones recibidas.
En el lugar donde derraparon los motociclistas se incautó una pistola 9 milímetros –que estaba escondida en la campera de Rostro–, otra del mismo calibre descartada en una zanja de la cuadra, que había sido robada a un policía en mayo de 2009, una moto color negra Motomel de 150 centímetros cúbicos y un total de 5.016 pesos que estaban desperdigados por el asfalto.
Al consultar sobre la procedencia del dinero por frecuencia policial, los uniformados se enteraron que pertenecía a Gabriel Antonio L., un cobrador y distribuidor de tarjetas magnéticas del Banco Municipal que había sido abordado minutos antes cuando estaba por bajar de su Fiat Duna bordó para depositar el dinero recaudado en la sucursal bancaria del distrito Noroeste.
El asaltante –Rostro– le rompió el vidrio y le exigió que le entregara la plata que llevaba para luego huir con 18.533 pesos a bordo de la motocicleta conducida por el ahora condenado.
Para el juez de Sentencia 1ª, Ismael Manfrín, había elementos suficientes para condenar a Amarilla y dictaminó una sentencia de 7 años y seis meses de prisión.
En sus consideraciones, el magistrado, descartó la presentación de la defensa que indicó que el imputado no negó haber sido el conductor de la motocicleta, como tampoco el recorrido efectuado desde el lugar del asalto hasta donde fue aprehendido; pero sí aseguró no haber sabido que Rostro estaba armado, que llevaba dinero en su poder y menos que iba a perpetrar un atraco. Sin embargo, el juez lo condenó a la pena de siete años y seis meses de prisión, accesorias legales y costas, como coautor penalmente responsable del delito de robo calificado por el uso de arma de fuego.