En sus primeras palabras tras la pérdida de la categoría, «Rolfi» ratificó que seguirá en el club para jugar en segunda división, deseó la continuidad del DT Miguel Angel Brindisi y agradeció a los hinchas por el respaldo recibido en la jornada deportiva más triste de la institución.
«La historia de Independiente es demasiado grande y no se mancha por esto. Es un dolor feo que no se puede explicar porque se cruzan muchos sentimientos», confesó el jugador, que regresó al club por tercera vez a principios de año para pelear por la permanencia.
Montenegro, de 34 años, admitió que al momento de decidir su retorno de México «no pensaba vivir una situación así» pero la aceptó como parte de las «reglas del fútbol».
«Tengo una sensación rara, es un momento raro… No lloré por respeto a mis hijos, no quería que me vieran mal. Con mi mujer hicimos ese pacto, nos prometimos no llorar porque la están pasando mal y van sintiendo todo lo que sentimos nosotros», explicó.
Con vínculo vigente hasta junio del año próximo, «Rolfi» confirmó su permanencia en el club para «poner a Independiente en el lugar que se merece».
«Va a costar acostumbrarnos pero las cosas están así, hay que cerrar los ojos y volver a abrirlos y pensar que vamos a estar de nuevo en Primera. Mentalizarnos de que vamos a estar en la B y lo vamos a hacer de la mejor manera y seguro como los principales candidatos», afirmó.
En relación a la permanencia de Miguel Angel Brindisi, el capitán del «Rojo» se expresó en términos positivos, al reconocer que el DT «ha hecho cosas importantes» desde su llegada al club, al promediar la mitad del Torneo Final.
«Me gustaría que se quede, es una persona que nos ha dado tranquilidad en un momento difícil, más allá de lo futbolístico. Le ha llegado mucho al jugador y está bueno tener esa palabra entre tanta locura», valoró.
Además, Montenegro, campeón del Apertura 2002 bajo la dirección técnica de Américo «Tolo» Gallego, reconoció el apoyo de los hinchas de Independiente el sábado cuando se consumó la pérdida de la categoría.
«Fue un momento de mucha emoción lo que la gente nos brindó, un respeto que nunca había visto. Es admirable las ganas con las que cantaron y esas cosas no se olvidan», ponderó.
Independiente, que bajó a segunda división por primera vez en sus 108 años de historia, regresará esta tarde a los entrenamientos de cara al partido ante Colón de Santa Fe, que marcará su despedida de la división mayor.