La última comisión de rescatistas de la Policía Federal que estuvo en Rosario con motivo de la explosión del edificio que provocó 21 muertos y decenas de heridos regresó hoy a Buenos Aires. En este sentido, el jefe de los socorristas, comisario Angel Poidomani, afirmó: «Sabíamos que podía colapsar todo, pero eso no nos hacía bajar los brazos».
El rescatista se refirió al tema en el espigón militar del aeroparque metropolitano Jorge Newbery, donde fue recibido junto a su equipo por el secretario de Seguridad, Sergio Berni. Desde las 8.30, acompañaron al funcionario kirchnerista en la terminal aérea altas autoridades de la Policía Federal en la recepción de 23 integrantes del Grupo Especial de Rescate (GER), además de dos socorristas de Detección y Adiestramiento.
Poidomani, por su parte, sostuvo que no esperaban «el aplauso de la gente de Rosario» al finalizar ayer las tareas de rescate porque la tragedia había calado hondo en los ciudadanos y destacó: «Nos trataron como parte de ellos».
«También, sabemos que, dentro de tanto dolor, pudimos llevar a los familiares (de las víctimas) la paz de saber que encontraron a sus desaparecidos y les pueden dar la sepultura que corresponde», dijo a su turno Berni al emitir un discurso breve ante los socorristas.
El funcionario completó: «Sabemos del sacrificio y del coraje de este grupo de hombres que, con mucha humildad, se puso al servicio de cientos de voluntarios que concurrieron a colaborar ante esta tragedia. Por eso, expreso un fuerte reconocimiento; misión cumplida». Luego, Berni saludó y estrechó la mano de cada uno de los rescatistas para felicitarlos.
El secretario de Seguridad, poco después, brindó una improvisada conferencia de prensa en el lugar, donde destacó que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner había «ordenado poner a los mejores hombres de la Policía Federal con especialización en rescate al servicio de Protección Civil de la provincia de Santa Fe».
«Tuve la oportunidad de estar dos veces en Rosario y ver cómo trabajaron diferentes grupos de bomberos y de rescate de otras provincias; es típico de los argentinos esa solidaridad», concluyó.
