Los damnificados por el derrumbe de Ovidio Lagos 522 volvían anoche a su casa. Tras la caída de una inmensa pared medianera con una obra en construcción que no contaba con el permiso de edificación municipal, los habitantes de cuatro departamentos de Lagos 532 iniciaron el regreso al cierre de esta edición, después de pasar las últimas horas, desde el domingo, en un hotel de la zona. En tanto, desde la Dirección de Obras Particulares informaron que “tanto el arquitecto responsable, Fernando Forchino, como la empresa constructora deberán dirigirse al Distrito Centro para regularizar su situación con los permisos correspondientes como también con las multas”.
El ingeniero Carlos Hyon, de Obras Particulares, aclaró que “tras los trabajos de apuntalamiento, los vecinos pueden volver a su casa; ya revisamos los inmuebles y constatamos que no existe peligro de derrumbe, por eso vamos a apuntalar la medianera y las paredes dañadas, además de todo el pasillo de ingreso para que puedan ir a su casa”, algo que se cumplía anoche.
María Eugenia Cardinale, una de las vecinas afectadas por el derrumbe de la pared, se mostró aliviada porque desde Promoción Social del municipio se hicieron presentes en el hotel donde se encontraba alojada con su familia y avisaron que se harán cargo de los gastos. De todas maneras, no pudo ocultar su enojo e indignación por el accionar de los responsables de la obra de Ovidio Lagos al 500.
“El arquitecto llegó al lugar como si nada y por una carta documento que le envió la Municipalidad para que se presentara. Miró todo, nos pidió disculpas por los daños ocasionados y dijo que se iba a hacer cargo de esas reparaciones. De todas maneras, la desprolijidad con la que trabaja este señor no me deja tranquila. Por lo menos espero que cumpla con arreglar los daños en mi casa y la de los vecinos”, expresó.
En Ovidio Lagos 522 habían demolido toda la construcción anterior y no se contaba con el permiso para construir sobre el terreno. Sin embargo, la empresa contratada por el arquitecto Fernando Forchino comenzó con los trabajos. Es por eso que ante un control de Obras Particulares la semana anterior fueron sancionados y obligados a suspender las tareas. “El problema es que la base, las paredes eran muy viejas, y encima que en la construcción picaron la medianera, el peso de lo construido sobre una base cada vez más débil terminó siendo una muy mala combinación”, apuntó el ingeniero Hyon.
El susto quedará en la memoria de los vecinos de Ovidio Lagos 532, cuando el domingo, alrededor de las 23, escucharon un estruendo, quisieron salir de su casa pero el pasillo estaba envuelto en polvo y escombros. Recién por la mañana, cuando se iniciaron las tareas de remoción de escombros, pudieron salir a la calle.