Lisandro Magallán y Pablo Becker están en duda para jugar el lunes próximo ante Lanús en el Gigante. Los dos jugadores fueron sometidos ayer a un estudio de imágenes para conocer la gravedad de las lesiones que padecieron el viernes pasado, jugando en Floresta ante All Boys.
Según confió el doctor Pablo Colella, el resultado de los estudios se demoró debido a las complicaciones que se generaron a partir de un corte de servicios que habría sufrido Central de parte del Sanatorio Británico.
Magallán sufrió un esguince en el tobillo derecho durante el segundo tiempo del encuentro ante el Albo. Y, según pudo averiguar este diario, la presencia del defensor para recibir al granate, estaría comprometida.
La situación de Becker
Lo del mediocampista ofensivo Becker, que padeció una sobrecarga muscular en el muslo derecho durante el primer tiempo, parece menos complejo para recuperar. Es más, según pudo averiguar este diario, en el examen que se le practicó al volante, no aparece ninguna imagen de lesión fibrilar.
De todos modos, recién hoy se conocerá oficialmente el resultado de los estudios que les realizaron ayer a los dos futbolistas. Y allí se podrá conocer con mayor precisión el tiempo de rehabilitación que deberán transitar Magallán y Becker para quedar a disposición de Miguel Russo.
Ayer, en la vuelta al trabajo del plantel, tanto Magallán como Becker cumplieron con tareas diferenciadas.
En cambio, Antonio Medina y Federico Carrizo, quienes habían terminado el partido del viernes pasado con distintas complicaciones físicas menores, practicaron sin inconvenientes a la par de sus compañeros.
Ferrari, ¿el capitán de la autocrítica?
Tras el empate obtenido en Floresta ante All Boys, el viernes pasado, los futbolistas de Rosario Central no realizaron declaraciones. Excusas de lado, no hubo voces oficiales para explicar el bajo rendimiento de un equipo que, jugando con un hombre más durante una hora, apenas si rescató un punto frente a los Albos.
Un par de días después del partido, el que realizó declaraciones fue Paulo Ferrari. El capitán auriazul habló en Zapping Sport, programa que se emite los domingos por la noche en canal Tres.
Allí, el Loncho dejó algunos conceptos sobre el momento que atraviesa el equipo. Y, además, reconoció que entiende la ansiedad que vive el hincha auriazul por este delicado presente.
En primer término, Ferrari analizó el 1 a 1 del viernes pasado frente a All Boys. “Se vio un partido trabado, luchado, en el que nos encontramos con un hombre de más en el primer tiempo, algo que nos permitió terminar mejor que ellos esa etapa”, contó sobre lo ocurrido en Floresta. “Pero el gol que nos convierten en el arranque del segundo nos cambió todo, complicó el partido, y no pudimos ganar”, comentó el Loncho.
Para el capitán auriazul, el no ganar jugando en condición de visitantes, no es un mal propio de Central. Según su visión, es algo repetido para todos los equipos que participan del torneo de primera división. “Lamentablemente no se pudo ganar, pero en esta última fecha a todos se les hizo difícil jugar de visitante”, contó Ferrari. Y rescató como positivo el hecho de que, empate, permitió que Central cortara “una racha de varias derrotas” fuera de Arroyito.
Más tarde, el lateral derecho del equipo que dirige Miguel Russo dio su opinión sobre los supuestos errores cometidos por el árbitro Fernando Rapallini en el cotejo ante All Boys. “Obviamente que los fallos nos preocupan, pero queremos mantenernos al margen y dedicarnos a entrenar”, dijo Ferrari. Aunque reconoció que, “por ahí en los últimos partidos nos vienen perjudicando con errores puntuales”. Así, el Loncho hizo alusión al penal que obvio Rapallini tras una clara falta de un defensor de All Boys sobre Pablo Becker. Algo que ya había ocurrido en la fecha anterior, cuando el volante Nicolás Aguirre, de arsenal de Sarandí, le cometió infracción dentro del área propia a Carlos Luna. Y Mauro Vigliano, juez de aquel encuentro, tampoco sancionó la infracción.
Por último, Paulo Ferrari admitió que entiende el disgusto de los hinchas de Central con la campaña que viene realizando el primer equipo.
“Es lógico que la gente esté ansiosa; quiere ganar, y que estemos más arriba en la tabla”, apuntó el Loncho. “Nosotros tratamos de mantenernos al margen, pero sabemos que tenemos que mejorar, como también sabemos que falta muchísimo y que tenemos un buen plantel para salir adelante”, concluyó.
