El ministro de Trabajo de la Nación, Carlos Tomada, recibirá hoy por la tarde a un grupo de trabajadores de Allocco, la metalúrgica de Villa Gobernador Gálvez que hace meses fue abandonada por los empresarios titulares de la firma y cuyos trabajadores pelean para evitar el cierre. La audiencia, pedida hace una semana, se concretará en las oficinas del ministerio en Capital Federal alrededor de las 18.30 y servirá para comunicar el avance de las gestiones para destrabar aproximadamente 900 mil dólares que irían a mitigar la deuda con los 140 empleados.
Tal como ocurrió con un reintegro desde el fisco en concepto de devolución del IVA para con la empresa, el dinero vendría esta vez de los derechos de exportación.
Según precisaron desde la Unión de Obreros Metalúrgicos (UOM), participarán siete trabajadores de la fabricante de máquinas y equipos para la industria aceitera. En diálogo con El Ciudadano, el delegado de la regional Rosario de Trabajo, Rubén Ferreyra, adelantó que en el encuentro se tratará también la liquidación de la cuota correspondiente al mes de septiembre de un subsidio que Nación entrega para paliar el desamparo laboral. “Fue producto de un convenio firmado entre el municipio de Villa Gobernador Gálvez y el secretario de Empleo, de 1.500 pesos mensuales por trabajador. De ningún modo corresponde al Repro (Programa de Recuperación Productiva)”, explicó el funcionario nacional.
En sintonía, el abogado de la UOM Pablo Cerra indicó que primero llegarían 300 mil dólares y luego el resto. Sin embargo, una de las preocupaciones tanto de la UOM como de los funcionarios de Trabajo es el nerviosismo de los empleados de Allocco. De hecho, esta reunión de hoy surgió tras un pedido de los trabajadores el martes pasado, cuando irrumpieron en las oficinas locales pidiendo por una respuesta respecto del crédito de Aduana. A la mañana siguiente un grupo repitió esa visita; al no poder ingresar en su totalidad, algunos quemaron neumáticos para interrumpir el tránsito vehicular en la esquina de Rioja y Sarmiento, protesta que se mantuvo hasta el mediodía.
El camino, insistieron desde la UOM, es continuar con la búsqueda de inversores y concluir la causa judicial que lleva adelante el proceso de quiebra.