“No sé quién hizo esto ni porqué. Estoy tranquilo y quiero que se investigue. Esto no sé si fue por drogas o por Newell’s. Lo odiaba muchísima gente y esto lo pudo haber hecho cualquiera. Esto es un ajuste de cuentas. Que busque la Justicia a los autores. No hay ninguna muerte que no se sepa quien fue el autor”, indicó Tato Camino, aún en la puerta del hospital Carrasco, donde se encuentra el cuerpo sin vida de su hermano Roberto, asesinado esta mañana de cinco balazos en inmediaciones de Servando Bayo al 1400, en el bar Ezeiza.
“Los responsables los tiene que buscar la policía. Como nos buscó a nosotros cuando hicimos lo que hicimos (ingresaron al predio de Newell’s a los tiros). Roberto nunca tuvo nada que ver, no por que esté muerto, porque se los hubiera cargado a él. Ni mi hermano ni yo tenemos nada que ver con la muerte de Walter Cáceres (NdR: tenía 14 años y lo asesinaron en una emboscada), la policía lo sabe bien. Todo el mundo sabe lo que hicimos, pero en esto no tenemos nada que ver. La policía sabe y la justicia debe ser para todos iguales. Le pido encarecidamente que se encargue. La Justicia sabe cuál es el problema de fondo de todo esto”, agregó el hermano de la víctima.
“Tengo entendido que estaba con un grupo de personas. Al único que asesinaron fue a él. Antes no me importaba patear una puerta y darle al que le tenía que dar, pero ahora cambié por mi familia. Pasé muchas cosas y no quiero que lo pasen ahora mis hijos. Tengo tres años más por delante para cumplir y no pienso hacer nada. No me la como más doblada”, concluyó.