Existen medios y gobiernos que temen la independencia de un periodista. Recuerdo que un periodista es un servidor de las realidades que a diario se producen. Su misión es poner el dedo en la llaga donde hay pus. No para aumentar el morbo de los dolores sino para hacerlos visibles y que la política no tenga entonces excusas para ignorarlos.
Enero comenzó a profugarse mientras algunos miles de turistas obcecados persisten en vacacionar. En definitiva, casi todos deseamos olvidarnos un rato de “la Argentina problema”. Difícil tarea para un país que no encuentra paz, seguridad y previsibilidad. El ministro Jorge Capitanich también se profuga todos los días un poquito más de muchas preguntas, que denotan una realidad que se debe ignorar. La inflación real pero no oficial, duplica la apuesta de la mejor ficción, le gana con holgura. Vivimos una Argentina donde no hay presente para los gobernantes, dado que se profugan argumentando para atrás. Y la ciudadanía necesita ver el horizonte. A propósito si vamos para atrás tuvimos dentro del propio gobierno kirchnerista en enero de 2011 52 mil millones de dólares de reservas; en este enero las mismas ascienden a sólo 29 mil millones de pesos. Siguiendo con nuestra mirada hacia atrás dentro del propio período kirchnerista conviven superávit fiscal, inflación con guarismos acordes a los que tiene el mundo, una moneda que el ciudadano elegía como resguardo con una deuda externa que se autorreproduce.
En el siglo XX Argentina fue pionera a la hora de cubrir su geografía a lo largo y lo ancho con clase media. Ese espejo del siglo pasado hoy no es realidad en Argentina, pero sí en los países en vías de desarrollo. Me decía días atrás el doctor Jorge Castro que en el 2030 la sociedad planetaria va hacia una abultada clase media. Hoy se la define como aquella que percibe ingresos anuales entre los 15 mil y 30 mil dólares. En esta realidad hoy hay en el mundo 1.900 millones de personas que se multiplicarán en aproximadamente 4.900 millones en el 2030.
También me contaba el doctor Castro cómo distintos países fueron achicando su pobreza desde 1991 a la fecha. China la redujo en 600 millones de personas; India en 250 millones. Brasil, una década después, desde 2001 la redujo en 40 millones de personas.
Los datos vertidos en este análisis no son inocuos. Por un lado nos muestran el casillero de la oportunidad. Esta clase media globalizada no sólo consumirá más sino que mejor. Un ejemplo: China aumentó en 600 millones de cabezas el consumo de cerdo; estos se alimentan de maíz, harina de soja y soja. Por el otro nos muestran el casillero de la oportunidad perdida: 12 millones de personas en Argentina son pobres, lo que representa el 30 por ciento de la población total. Argentina, detrás de Estados Unidos y Brasil, es el tercer productor mundial de agroalimentos.
Esta semana el BID premió al gobierno de Santa Fe, en la figura del doctor Antonio Bonfatti, por la política que se lleva adelante en el tema seguridad. Es duro mencionar que mientras ello ocurría, en Rosario desde la propia sede la Jefatura de Policía se fugaba un sicario narco, zafándose de las esposas, reduciendo a los custodios y escalando muros.
En este caleidoscopio de realidades despatarradas o anárquicas los candidatos para el 2015 se buscan, se miden, se unen, se separan, avanzan, retroceden. El radicalismo tiene dos candidatos presidenciables. Como me dijo un gran conocedor de la realidad partidaria de la UCR, “Ernesto Sanz logró con esfuerzo tener hoy el cariño del radicalismo, pero Julio Cobos tiene los votos”. El baquiano en estas lides se atrevió a decirme: “En una interna abierta Cobos le gana de orejas paradas a Sanz y Hermes Binner”. La diputada Alicia Ciciliani, siempre clara en sus conceptos, me dijo: “Trataremos de lograr una fórmula por consenso, de lo contrario habrá que ir a internas. El sector reunido antes de fin de año en Rosario apuesta a un acuerdo de partidos y no de personas. Estamos en la etapa de los acuerdos programáticos”. Esto viene a cuento de las fotos que esta semana mostraron por un lado a Fernando “Pino” Solanas y Julio Cobos y por otro a Binner y Sanz. No le quitó el cuerpo a la hora de hablar del narcotráfico en Santa Fe y dijo: “México es el espejo, lo vimos esta semana con lo ocurrido entre civiles y fuerzas federales en Michoacán” (la diputada hace referencia a las autodefensas civiles armadas que luchan desde hace un año contra los cárteles, las cuales no aceptan el pedido de desarme de las fuerzas federales). Y sobre las internas que afloraron públicamente en estos días dentro del socialismo santafesino, fue lapidaria al decir: “No podemos ni debemos imitar lo peor de los grandes partidos”.
En traje de baño, los presidenciables Daniel Scioli, José Manuel de la Sota y Sergio Massa son esperados por Hugo Moyano y Luis Barrionuevo. Carlos Reutemann no será de la partida: “Por ahora concurriré a las reuniones que tengan que ver con la política del campo”, dijo el senador.
La autora conduce «Convenio» en Radio del Plata FM 107.5 los sábados de 10 a 12
