«Brasil está más retrasado en la preparación que Sudáfrica en el mismo período. Pero no dudo de que un gran país de 200 millones de habitantes organizará un gran Mundial de fútbol», manifestó Blatter en una entrevista con la Revista France Football que reproduce la agencia EFE.
No obstante, a pesar de mostrarse confiado, el máximo dirigente del fútbol remarcó: «Es la primera vez que un país tenía siete años para organizar un Mundial y tiene retraso».
En ese sentido, Blatter dio detalles de la reunión que tuvo la semana pasada con la presidente de Brasil, Dilma Rousseff, quien le garantizó que la cita se desarrollará con normalidad.
«Le hice un pase en profundidad a Rousseff que recibió bien. Después nos hemos intercambiado mensajes y me ha dicho: `la pelota está en nuestro campo y voy a probarle que estaremos listos`», contó el suizo.
Por otro lado, el mandatario de la casa madre del fútbol minimizó las protestas en contra del Mundial que se llevaron a cabo durante los últimos días en varias ciudades brasileñas.
«Puede que algunos utilicen el Mundial para hacerse escuchar. Pero cuando la competición comience y el seleccionado brasileño se lance a la conquista de su sexto título, no creo que nadie quiera dañar al fútbol», concluyó.