La única novela de Charles Chaplin, «Footlight», que sirvió de inspiración para su célebre film «Candilejas», se publicará por primera vez, más de sesenta años después de que el actor y director de cine británico la escribiera, en 1948.
Las distintas partes de la obra, en forma de manuscritos y guiones mecanografiados, permanecían en los archivos Chaplin de la Cinemateca de Bolonia (Italia), encargada de digitalizar todos los trabajos del cineasta y ahora a cargo de la publicación de esta novela.
Compuesto por 34.000 palabras, «Footlight» ha sido reconstruido por el biógrafo de «Charlot», David Robinson, que lo ha incluido en un libro titulado «The World of Limelight («El mundo de Candilejas»)», informa EFE.
Robinson incluye en ese libro un comentario suyo y una descripción de la novela, inspiración de «Limelight («Candilejas», 1952)», considerada el mejor trabajo cinematográfico de Chaplin (1889-1977) por la sensibilidad de sus personajes y su originalidad.
Una de las directoras de los archivos Chaplin en Bolonia, Cecilia Cenciarelli, declaró al diario inglés The Guardian que la novela es la historia de un cómico que ha perdido contacto con su público, que tiene pesadillas y está «desencantado con su carrera».
Chaplin escribió esta única novela en 1948, cuatro años antes de la película y antes de verse obligado a abandonar Estados Unidos a principios de los años 50 por la implacable persecución de Edgar Hoover, el que fuera director de la Oficina Federal de Investigación (FBI), por considerarlo simpatizante comunista.
Según detalles divulgados en Londres por Robinson, la historia cuenta con personajes similares a los de «Candilejas», el cómico alcohólico y mayor de edad, Calvero (Chaplin), y la bailarina Thereza (Claire Bloom) a la que salva del suicidio.
La novela de Chaplin profundiza aún más en el estado emocional de estos dos personajes y ayuda a entender la personalidad del director de cine antes de su exilio en Europa.
Robinson contó a The Guardian que el libro no fue escrito con la intención de ser publicado sino como un ejercicio íntimo de Chaplin, un actor criado en un barrio pobre de Londres que dejó Inglaterra a principios del siglo XX para radicarse en Estados Unidos.
De acuerdo con el biógrafo, la novela muestra el lenguaje de un hombre autodidacta, que llevaba consigo siempre un diccionario y que se esforzaba por aprender una palabra nueva cada día, como traquetear, florecer o fanfarronada.
«En cuanto tenía una palabra que le gustaba, la usaba, incluso si no era la correcta para esa situación. No obstante, escribe de manera increíble. Con sus películas, él trabajaba y trabajaba hasta que salían bien, y es lo mismo con este libro. Es una buena lectura. Es raro, pero bueno», dijo Robinson.
A lo largo de su vida, Chaplin -distinguido con la Orden del Imperio Británico en 1975- recibió numerosos reconocimientos, como el premio Óscar Honorífico en 1928 y 1972, además de ser candidato al premio Nobel de la Paz en 1948.