La intendenta Mónica Fein anunció ayer el inicio de grandes obras de infraestructura para barrio Itatí. “Darle calidad de vida a los ciudadanos nos alegra mucho”, resaltó la mandataria. Las tareas se enmarcan en un convenio que la Municipalidad firmó con el gobierno nacional a través del Programa de Mejoramiento de Barrios III (Promeba). Se estima que más de 700 familias serán beneficiadas, con una inversión que supera los 33 millones de pesos.
Barrio Itatí está delimitado al este por bulevar Oroño, al sur por calle Juan Canals, al oeste por avenida Ovidio Lagos y al norte por calle Doctor Riva; en el sudoeste de la ciudad. Es uno de los barrios más pobres de Rosario que ahora, si el plan marcha como corresponde, comenzará a regularizarse. El objetivo principal de este programa es darle vida y urbanizar los barrios. Eso es, abrir calles, instalar cloacas, pavimentar, dar equipamiento comunitario y regularización dominial. “Buscamos mejorar la calidad de vida, generar cambios sociales y urbanos que disminuyan la tensión social”, sintetizó Raúl Álvarez, director del Servicio Público de la Vivienda y el Hábitat.
Se abrirán 38 nuevas cuadras y se rectificarán pasillos para poder acceder a la infraestructura y posteriormente la escrituración de las propiedades. La inversión será de un total de 33.019.488 pesos. También se llevarán a cabo obras complementarias por un monto de 9.629.661 pesos a través de contratos con cooperativas de trabajo.
Según recordó Álvarez, en Rosario abundan los asentamientos. Muchos terrenos ferroviarios abandonados fueron ocupados por familias que llegaron de otras provincias y países limítrofes. “En la medida en que la situación de otras regiones no se resuelva, la migración interna vendrá a Rosario. Muchos eligen esta ciudad porque a pesar de las condiciones de vida se garantiza el acceso al trabajo, la salud pública, la educación”. Con este panorama, más de un proyecto de urbanización –convenido con la provincia o la Nación– alcanza a los barrios de la ciudad. La Cerámica e Industrial, dos de ellos. “La meta es que en algún momento no se sepa que ahí hubo un barrio irregular”.
El municipio trabaja con barrio Itatí desde 2005, en el marco del Programa Rosario Hábitat. El asentamiento contaba inicialmente con alrededor de 1.000 familias que ocupaban un amplio sector entre bulevar Oroño y Ovidio Lagos, a la altura del 4000, que no permitía la continuidad de varias calles, entre ellas Callao, Rodríguez, Pueyrredón y Santiago, entre otras. En los últimos años, unas 400 familias fueron reubicadas y comenzó la urbanización.
Álvarez resaltó que “durante el desarrollo del proyecto el 70 por ciento de los componentes del barrio participó de la toma de decisiones a través de lo que es la participación popular”. Luego comentó que “con esta segunda etapa del proyecto Itatí con el financiamiento Promeba, un financiamiento del Banco Interamericano de Desarrollo que es canalizado a través de la Nación, se podrán completar las obras de infraestructura urbana, servicios (aguas, cloacas, desagües pluviales, pavimentos, tendido eléctrico y veredas) y en el final la regularización dominial de las familias que viven en el lugar, algunas hace más de 40 años”.
El presidente del directorio del SPV aportó que “el año pasado el gobierno nacional, a través del la Comisión Nacional de Tierras para el Hábitat Social Padre Carlos Mugica, donó al dominio público municipal las trazas de todas las calles del barrio, por lo cual las trazas que vamos a intervenir ya son propiedad de la Municipalidad de Rosario. Pero además de ello todo esto es importante para poder aprobar los planos de urbanización y de allí en adelante el loteo y llegar a la regularización dominial que todos esperamos”.