Cuando asumió la actual comisión directiva de Newell’s, encabezada por Guillermo Lorente, había tres caminos perfectamente detectados para sacar adelante a Newell’s. Recuperar la parte social y económica del club como institución, armar un equipo de fútbol (después de los primeros seis meses, hay que remontarse un año en el tiempo) y por último darle vida a las deterioradas divisiones inferiores.
El fútbol tuvo un premio exagerado, jamás pensado por sus actuales dirigentes, que fue la pelea cabeza a cabeza con Banfield por quedarse con el Apertura 2009, que finalmente quedó en las vitrinas del Taladro. Pero más allá de esa situación, Eduardo Bermúdez (vicepresidente) y Gustavo Dezotti (mánager) armar un equipo desde sus contactos, sin prestar demasiada atención a lo que venía debajo (inferiores) y tampoco se priorizó la calidad de los contratados (no se puede hablar de refuerzos, en algunos casos), la cosa pasaba por sumar gente al baile.
Así llegaron jugadores que rindieron muy bien como Boghossian (de flojo torneo Clausura), Achucarro recomendado por Claudio Vivas a Bermúdez también defendió la plata que se pagó por él, y Mateo que llegó regalado y fue figura. El resto fue apenas un poquito, que sirvió para darle forma al equipo, pero que se debe corregir.
Barrientos no fue, ni cerca, de aquel cinco patrón que manejaba el fútbol de Huracán, cuando jugaba con los ligamentos cruzados de su rodilla rotos, después de la operación nunca volvió (siquiera en un partido) a ser aquel jugador de notable claridad para distribuir el juego y muy combativo a la hora de marcar. Roselli, Dolci, Jorge Núñez, pasan con más pena que gloria.
Ahora llegan los tiempos de cambios, ya hace más de un año que Jorge Theyler y su gente trabaja para el futuro de Newell’s. Si bien su desempeño se podrá analiza dentro de tres años, algunos pibes debieran estar para jugar en primera. Al menos en un mismo nivel que Barrientos, Dolci, Roselli, Núñez, y Quiroga, hoy bastante devaluado. Por tal, las incorporaciones deben ser de valía, caso contrario no servirán de mucho.