El Concejo Municipal comenzará a analizar en breve una iniciativa que permitirá flexibilizar los niveles de construcción y ampliación de viviendas en el barrio San Francisquito, en el sudoeste de la ciudad. El proyecto modifica un artículo de la ordenanza que regula los niveles de edificación del llamado Segundo Anillo Perimetral, aprobada en 2012. La norma permite en la zona sólo cuatro metros de altura, por lo que la nueva propuesta pretende llevarlo a seis metros.
Quien ingresará la iniciativa formalmente al Palacio Vasallo es la concejala socialista Viviana Foresi. “Lo que se propone es una modificación de las alturas permitidas, tanto para ampliación o construcción de vivienda en inmuebles frentistas, internos o de centro de manzana”, explicó en diálogo con El Ciudadano.
La edila señaló que las modificaciones introducidas al Código Urbano en la zona (denominada técnicamente Segundo Anillo Perimetral) sancionadas en 2012 restringieron en demasía la posibilidad de construir o ampliar viviendas. “Ese sector quedó configurado con un perfil muy industrial y de logística. Y eso está trayendo algunas limitaciones a quienes quieren instalarse o refaccionar su vivienda”, señaló la concejala socialista en diálogo con este diario.
El texto que ingresará al Palacio Vasallo proyecta que para los inmuebles industriales y galpones que hay en el barrio la altura máxima se mantenga en quince metros, mientras que para las viviendas el tope se eleve de los actuales cuatro a seis metros. En tanto, en el caso de construcciones mixtas, se tomará como referencia el uso principal de la propiedad.
Según confiaron desde el Concejo, como no podían hacerlo ya que la norma se los impedía, el año pasado varios vecinos de San Francisquito ingresaron pedidos de excepción solicitando poder sumarle un piso a su casa.
“Es algo común, por ejemplo, en quienes quieren agrandar la casa para un hijo. Y en el barrio se encontraron con que hoy no pueden hacer eso”, manifestó Foresi.
La concejala oficialista agregó que la revisión también abre la posibilidad a que los proyectos de construcción o ampliación “se enmarquen en los requerimientos de las líneas de financiamiento existentes”. Es que también hay casos de habitantes de la zona que tienen créditos tomados con proyectos previos a desarrollar y actualmente no pueden avanzar.
La normativa que modificó el Código Urbano en la zona fue sancionada en octubre de 2012. En líneas generales, el Segundo Anillo circunvala al Primero (que llega hasta 27 de Febrero al sur, Vera Mujica al oeste y avenida Del Valle al norte) hasta los límites de bulevar Seguí al sur, vías del ferrocarril Belgrano al oeste y calle Marull (barrio Alberdi) al norte.
Según estimaciones del municipio, en la zona hay radicados unos diez mil comercios, industrias y empresas de servicios. Con el Código aprobado hace un año y medio alrededor de 250 quedaron realizando actividades que la nueva normativa no les admite. Todas esas firmas tendrían que mudarse.
El nuevo Código busca que el barrio San Francisquito, detrás del Mercado de Productores, esté llamado a desarrollarse a futuro como zona de depósitos y empresas de logística porque en su jurisdicción hay más galpones que viviendas.
Ese direccionamiento es el que está trayendo complicaciones a lo vecinos de la zona.
