“Nosotros tenemos un temario que está muy vinculado con Rosario pero también con la realidad nacional. Lo que está ocurriendo en Rosario también pasa en otros sitios de la Argentina”, señaló Ernesto Moreau, el presidente de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH) al explicar los objetivos de la organización, que realizó el viernes 25 y el sábado 26 de abril el Encuentro Nacional de Militantes en Rosario. Al mismo tiempo, desde APDH advirtieron que los recientes linchamientos producidos en el país son parte de “un proceso de fascistización de la sociedad argentina”.
Acompañado por otros referentes, como la flamante vicepresidenta Norma Ríos, y la también vicepresidenta Inés Izaguirre, el titular de la Asamblea se entrevistó con El Ciudadano para comentar su labor en los juicios a represores y su opinión sobre la sociedad actual.
“Nosotros tenemos un temario que está muy vinculado con Rosario pero también con la realidad nacional. Lo que está ocurriendo en Rosario también pasa en otros sitios de la Argentina”, insistió.
Además de invocar las características de “organización histórica y fuerte” de la APDH Rosario, entre las razones de la realización del encuentro en Rosario, Moreau destacó otros motivos: “También hay otros episodios que convocan, como ser el narcotráfico, la violencia policial, la violencia social. Aunque no esté en el temario, la trata de personas nos interesa y está vinculada con el narcotráfico porque, en general, los mismos sujetos se dedican a esos comercios. Los índices de homicidio en Rosario llaman la atención porque son muy elevados. No se puede negar que en otros lugares también suceden asesinatos pero en Rosario es destacable la cantidad que alcanza”.
El pasado viernes 25 de abril, los referentes de la APDH, acompañados por sus militantes locales y abogados que participan de los juicios de causas de lesa humanidad, entre ellos Gabriela Durruty, se reunieron con autoridades del Ministerio de Justicia y la Secretaría de Derechos Humanos de la provincia, para intercambiar opiniones sobre la situación en Santa Fe, especialmente Rosario.
En los encuentros también se abordaron las diversas problemáticas en las que trabaja la Asamblea, en especial las formas de violencia institucional (narcotráfico, la situación en las cárceles, el accionar policial) y la violencia de género, entre otros temas. Al día siguiente, la organización defensora de derechos humanos realizó un encuentro entre sus componentes para debatir un balance de su labor.
Violencia del presente
Preguntados por la violencia en la actualidad, en particular sobre los linchamientos a ladrones, Izaguirre afirmó: “Yo tengo la hipótesis de que los efectos en los cambios de la sociabilidad en Argentina, los estamos percibiendo ahora y vienen de la época de la dictadura. La tortura, la desaparición, matar a otro, todo eso se fue naturalizando”.
“A veces nos preocupa y nos preguntamos qué podemos hacer. Yo le recomiendo a la gente que está en contacto conmigo que hable, y que diga que eso está mal. Eso es un asesinato. El que sufre el asalto también es víctima. Pero matar por un robo menor, no me parece una solución. Más del 90 por ciento de los encarcelados son por delitos contra la propiedad. Sin embargo, hay muchas otras formas de delincuencia. Yo creo que esto es un proceso de fascistización de la sociedad argentina”, sostuvo la socióloga del grupo de estudios Gino Germani.
Por su parte, Norma Ríos expresó: “En APDH hay gente que está comprometida con la realidad social, pero también tiene una gran sensibilidad para abordar determinados temas. Hace unos días, vino a nuestra organización, un señor que había perdido a su hija. El hombre estaba muy abrumado y confundido. Y nosotros lo tranquilizamos y lo orientamos en la búsqueda, principalmente porque mucha gente de APDH estuvo en una situación similar, de haber perdido a alguien cercano. Un abogado le había dicho que había iniciado el trámite y punto. Sin embargo, nosotros le aconsejamos y lo acompañamos a buscar a su hija de una manera muy enérgica, golpeando todas las puertas, porque ese camino era clave. Lo más importante que le pasaba a él, era que su hija no estaba y para nosotros también”.
El papel de la juventud
Los referentes de APDH se mostraron preocupados porque quienes protagonizaron estos episodios de agresión son, en gran parte, jóvenes. Sin embargo, también relataron que en las organizaciones de derechos humanos, en particular la que ellos llevan adelante, hay una importante participación y compromiso de la juventud.
“En APDH hubo cambios en su dirigencia pero hay que destacar que en Rosario, una compañera joven es titular de la entidad. Muchos compañeros que no pasan los 35 años, tienen derecho a dirigir estas instituciones porque desde hace mucho tiempo le vienen poniendo el cuerpo a la militancia con mucho interés. En ese sentido, los jóvenes de la ciudad y la región ocupan un lugar que se merecen, porque además, queremos romper con la lógica de muchas organizaciones donde los más chicos tienen que pujar para ocupar puestos de dirección”.
“Blaquier fue una de las patas más poderosas de la dictadura”
Entre los principales procesos judiciales que lleva adelante APDH, se encuentra la causa contra Carlos Pedro Blaquier, el dueño del ingenio Ledesma. “Blaquier no debería ser juzgado solamente por lo que sucedió en Jujuy”, afirmó Moreau en referencia a la desaparición de trabajadores de esa empresa, en particular a la célebre “Noche del apagón”, en la que muchos obreros jujeños y hasta un intendente desaparecieron.
“Él fue una de las patas más importantes, más poderosas de la dictadura. Era el personaje de la aristocracia porteña que, en unión con el feudalismo de la familia Arrieta, hacen esa empresa para producir papel. Así arman un esquema social y comercial que es casi como de la realeza. El empresario Blaquier operaba con la dictadura”, expresó el titular de APDH.
“En Jujuy hay desaparecidos más allá de los trabajadores de los ingenios azucareros, porque este empresario claramente está implicado en el diseño del Operativo Independencia. Las listas de dirigentes, las detenciones producidas antes del golpe del 76 de trabajadores que logran aparecer con vida, posteriormente son personas desaparecidas durante la dictadura”, explicó.
