La mañana de ayer comenzó tensa en la sede local del gremio de camioneros. Policías custodiaron el local de Pasco al 1000 ante la “inminente” llegada de Pedro Mariani y Hugo Moyano desde Buenos Aires para intervenir el sindicato, lo que finalmente no sucedió. En el gremio permanecieron unos 400 afiliados del sector de Rubén López que resisten la intervención nacional y denuncian a la anterior conducción de Marcelo Dainotto, a quien desplazaron por el “mal manejo de los fondos” del gremio provincial tras la asamblea fatídica del 12 de abril que culminó con la muerte del joven afiliado Nicolás Savani. El muchacho integraba una delegación del sector de Dainotto que fue interceptada a balazos cerca del camping gremial de Pérez, donde se desarrollaba la asamblea dominada por el sector de López.
El sector que lidera López sostiene que no desconocen a la conducción nacional de Hugo Moyano, que quieren seguir formando parte de la Federación, pero le piden al líder camionero que deje actuar a la auditoría para que reúna las pruebas que “incriminan” a Dainotto en el “manejo indebido de los fondos” del gremio santafesino.
En rigor, explicaron que el 17 de mayo es la fecha de la próxima asamblea en la que darán a conocer las conclusiones y que se mantienen parapetados en la sede de calle Pasco para “custodiar” las pruebas y los documentos contables del sindicato.
Un grupo de delegados que responde a la facción de López dialogó con El Ciudadano y aportó las pruebas para demostrar, a su entender, el “desvío de fondos” del sindicato por parte de Dainotto.
Los delegados David Giménez, Carlos Galloli, Raúl Ojeda, Roberto Ferraco, Luis Gómez y Juan José Sedita, explicaron: “De la auditoría que están realizando contadores y abogados se desprende la compra de un departamento en Miami, que le costó 400 mil dólares y está a nombre de la mujer de Dainotto (María del Carmen Spahn), pero la plata salió del gremio. Utiliza a la familia para desviar los fondos para llevarse la plata”.
Y continuaron: “La auditoria contable nos está dando información de los gastos que se hicieron de cosas que nosotros como afiliados no las recibimos. El 23 de octubre de 2013 se compraron guardapolvos (por un monto de 484 mil pesos) que supuestamente se iban a entregar con los útiles de este año y no están”.
En el mismo sentido, los delegados agregaron: “Si Moyano quiere defender a los trabajadores, tiene que estar con nosotros. Tiene que escucharnos, dejarnos que esta auditoría se haga con la gente de Santa Fe, que se pueda llegar a buen puerto, para ellos tener las pruebas de qué es lo que pasó, cuál es el desfasaje y quién es el responsable”.
“También se desvió plata a la empresa MVD, esas son las iniciales de Marcelo Vital Dainotto, es la escudería de él, está bancando con nuestra plata un auto de carreras. La dirección de la factura es de la casa particular de Dainotto. Para pedir un litro de leche para un pibe enfermo, no te lo dan. Los afiliados tienen muchas más necesidades que poner el sponsor en un auto, menos de la escudería del secretario general. Desvió esa plata para bancar un gusto personal”, sostuvieron.
“En estos momentos tanto Dainotto como el tesorero (Miguel Ángel Caichiolo) son los que están autorizados para firmar los cheques para dar las prestaciones de la obra social y se están negando rotundamente. Y la gente necesita atención, necesita operarse y lo están usando como una herramienta de presión”, explicaron los delegados.
Los fondos para la obra social que se recaudan por los afiliados en Santa Fe son enviados a Buenos Aires para que de allí la Federación abone a los prestadores. Pero para que esto suceda, se necesita de las firmas de Dainotto y Caichiolo.
“A Moyano y Mariani si quieren venir a ver las pruebas, se los va a recibir en paz, sin forcejeos. Pero intervenir, no”, indicaron.
“El local nunca fue tomado por la fuerza ni nada, nosotros entramos al gremio a que se custodie los papeles. Nos quedamos para resguardar lo que hay”, concluyeron los delegados del gremio enrolados en el sector que comanda López.