La Secretaría de Control y Convivencia Ciudadana informó que un operativo especial tuvo lugar hoy en la zona sur de la ciudad con el fin de liberar el espacio público de vehículos abandonados. El saldo fue un total de 60 unidades retiradas de las calles, de las cuales nueve de ellas debieron ser remitidas al corralón.
“Nuestro objetivo es garantizar la circulación y permanencia segura en la ciudad para todos. Una forma de concretarlo es terminar con la presencia de vehículos cuyos titulares descuidan, generando suciedad e inseguridad en sus entornos”, señaló el responsable del área municipal Pablo Seghezzo.
De acuerdo a los detalles brindados por el funcionario, durante la jornada, una docena de agentes municipales del área a su cargo, en colaboración con unos 30 efectivos de la Policía Comunitaria, llevaron a cabo un intenso procedimiento preventivo en los barrios La Granada, Las Flores Este y 17 de Agosto en el que se remitieron nueve autos abandonados al corralón municipal.
“El jueves pasado estuvimos en la zona a pedido de los vecinos quienes habían manifestado la preocupación por la existencia de coches en estado de deterioro a los agentes de la Policía Comunitaria”, indicó y agregó: “En consecuencia, nos presentamos en el lugar y concretamos 60 intimaciones”.
Según explicó, el procedimiento consiste en contactar a los dueños de las unidades a fin de obligarlos a que se hagan cargo de las mismas y las quiten del espacio público. En algunas oportunidades, los titulares se responsabilizan pero en otros casos persisten en la falta. “Del total de 60 intimaciones, nueve no fueron atendidas por lo cual, ese número de autos debió ser retirado por el Estado municipal y conducido al corralón”, manifestó.
Desde la puesta en marcha de la Secretaría de Control y Convivencia el 18 de noviembre pasado se labraron 1860 intimaciones sobre vehículos abandonados en vía pública. De ese total, 1585 fueron resueltas. “Son unidades que ya no “duermen” en la calle”, apuntó Seghezzo.
Los vehículos que no son mantenidos correctamente por sus dueños generan inconvenientes en su entorno. El deterioro que significa dejar un auto o un ciclomotor en la vía pública provoca en principio, grados de contaminación ambiental que deben soportar los vecinos de la zona. “Los coches abandonados generan fluidos contaminantes, se convierten en chatarra, en residuos que perjudican al medioambiente”, explicó el secretario.
