Luego de varias reuniones llevadas a cabo durante toda la jornada de hoy, y tras no llegar a un acuerdo, cerca de las 18, la Unión Tranviarios Automotor (UTA) ratificó que los choferes de micros de larga distancia comenzarán a partir de la 0 de mañana con un paro por tiempo indeterminado.
Sin embargo, y pese a no llegar a un acuerdo, cerca de las 19 decidieron levantar la medida de fuerza, con el objetivo de no afectar a la población (en especial de Capital Federal y provincia de Buenos Aires), donde este fin de semana comienza el receso escolar de invierno.
Voceros de la UTA indicaron que la medida de fuerza no iba a levantarse ya que los empresarios del sector se mostraban «extremadamente duros y se niegan a recomponer salarios».
El levantamiento de la medida de fuerza fue anunciado por el secretario general de la UTA, Roberto Fernández, luego de una reunión con el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, funcionarios del Ministerio de Trabajo y representantes de empresas de transporte.
«Nosotros levantamos el paro. Los empresarios no aceptaron la propuesta del Gobierno pero esperamos que mañana se resuelva ese tema», afirmó el gremialista.
La UTA pretende un aumento de casi 30% en los salarios, más viáticos para 23 mil trabajadores.
El paro iba a afectar únicamente a los servicios de larga distancia, ya que corta y media ya habían firmado un acuerdo salarial.
«El aumento que pedimos es exactamente el mismo que recibirán los choferes de corta y media distancia», señaló Fernández, quien además precisó que el reclamo es de un 28%, «más dos adicionales de 1.500 pesos cada uno a cobrar en septiembre y noviembre».