La titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, dijo ayer que siente que Guido, su nieto restituido luego de 36 años de búsqueda, es como si “fuera de todos y todos festejan”. En ese sentido, afirmó que ese sentimiento compartido por la sociedad argentina significa “sanear una parte que está golpeada”.
“No tengo nada que empañe esto que estoy viviendo. Parece que Guido fuera de todos y todos festejan. Es una maravilla, es como sanear mucha parte de nuestra sociedad que está golpeada”, dijo Carlotto al referirse a la semana que vive desde que supo, el martes pasado, que había encontrado a su nieto, desaparecido tras el asesinato de su madre Laura Carlotto (lo misma suerte que corrió su padre el militante Oscar Montoya), a manos de la dictadura militar en 1978.
En diálogo con Radio Nacional, la presidenta de Abuelas se refirió al encuentro que tuvo antenoche Guido con su familia biológica paterna, y que por unos minutos ella compartió.
“Es gente maravillosa, muy buena, que vino desde el sur a conocer a su nieto”, dijo sobre la abuela paterna de Guido –quien hasta hace uno días era simplemente Ignacio Hurban–, Hortensia Ardura, y su tío Jorge Montoya, quienes llegaron anteayer desde su ciudad, Caleta Olivia, para conocer al hijo de Laura Carlotto y Walmir Oscar Montoya.
La titular de Abuelas celebró que la familia Montoya haya depositado su sangre en el Banco Nacional de Datos Genéticos, ya que esto permitió completar la historia biológica, lde Ignacio Guido y así poder “tener toda la familia completa”.
Más adelante, y con notoria disfonía, Carlotto explicó que se tomará los próximos días “para acomodar” sus ideas y amoldarse “a esta nueva situación” personal y familiar a la que calificó como “maravillosa”. “Necesito serenidad y reposo mental y físico para acomodar las cosas en su lugar y entrar en esta maravillosa realidad”, confesó Carlotto al anunciar “un impasse” con los medios de prensa.
Agregó que su nieto partió para su ciudad, la localidad bonaerense de Olavarría, que seguramente se comunicarán telefónicamente y una vez más pidió ““darle tiempo porque yo soñé con esta situación pero él no”.