El candidato a la presidencia Eduardo Campos, del Partido Socialista de Brasil (PSB), de 49 años, murió al estrellarse el jet ejecutivo en el que viajaba a la ciudad de Santos.
El candidato, tercero en las encuestas para las elecciones del 5 de octubre y compañero de fórmula de la ecologista Marina Silva, estaba a bordo de un Cessna 560XL que cayó sobre un gimnasio y viviendas de Santos, ciudad ubicad a unos 75 kilómetros de San Pablo.
Además de Campos, exgobernador de Pernambuco (al noreste de Brasil), otras seis personas estaban a bordo del jet ejecutivo y ninguna sobrevivió, indicó la Fuerza Aérea brasileña.
La aeronave había despegado del aeropuerto Santos Dumont en Rio de Janeiro, con destino al aeropuerto de Guarujá (litoral de San Pablo), precisó en un comunicado Pedro Luís Farcic, jefe del centro de comunicación de la Aeronáutica brasileña.
«Cuando se preparaba para aterrizar, el avión cayó debido al mal tiempo. Enseguida, el control de tráfico aéreo perdió contacto con la aeronave», explicó.
En el lugar del siniestro, en una poblada área de la ciudad portuaria de Santos, quedó el jet destrozado en medio de escombros en llamas, de donde se elevaba una columna de humo.
Thiago Fernandes, dueño de un restaurante a una cuadra del lugar del hecho, contó que escuchó un gran estruendo y todos los vidrios del frente de su comercio estallaron.
«Estaba trabajando en el restaurante y hubo un estruendo muy fuerte, como nunca escuché antes. Todos los vidrios del frente se quebraron. Luego nos dijeron que una aeronave cayó sobre la piscina de un gimnasio que está a una cuadra», dijo.
La campaña electoral para los comicios nacionales de octubre comienza oficialmente el 19 de agosto, remarcaron fuentes del gobierno del vecino país. Campos se dirigía al estado de Sao Paulo para realizar grabaciones televisivas de la campaña junto a Marina Silva.
La última encuesta Ibope, difundida el 22 de julio, dio a la presidente Dilma Rousseff, del Partido de los Trabajadores (PT, izquierda), como favorita para la reelección, con un 38% de las intenciones de voto, seguida por su principal rival, el socialdemócrata Aécio Neves (PSDB), con un 22%. En tercer lugar se ubicaba Campos (PSB), con un 8%. Todos los candidatos suspendieron sus campañas.
Rousseff tenía previsto participar en un espacio de entrevistas con candidatos presidenciales promovido por el canal de televisión Globo, donde precisamente había concurrido Campos.
Según fuentes del Partido de los Trabajadores (PT), que postula a la presidente a la reelección, esa entrevista ha sido suspendida, al igual que los actos previstos para los próximos días.
«Toda su agenda será revisada ahora», explicó un portavoz de la campaña de Rousseff.
Lo mismo decidió el senador Aécio Neves, candidato del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), quien canceló las actividades que tenía previstas en la ciudad de Natal, en el noreste del país.
La única candidata a la presidencia que se pronunció en forma inmediata fue Luciana Genro, abanderada del minoritario Partido Socialismo y Libertad (PSOL), quien a través de su cuenta en la red social Twitter afirmó que «la campaña se vistió de luto».
Genro consideró la muerte de Campos como una «tragedia terrible» y también anunció la suspensión de todos sus actos de campaña.
