La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) realizó hoy tres allanamientos en sedes del Banco HSBC en la Argentina, en el marco de una investigación por evasión tributaria y lavado de dinero.
En la causas se investigan maniobras de evasión de 224 millones de pesos y lavado de dinero por más de 392 millones de pesos, según denuncias presentadas por la dependencia oficial ante la justicia.
Los allanamientos se llevaron a cabo en la casa matriz del banco, Florida 201 y también en las sedes de Avellaneda y Caseros.
Fuentes judiciales señalaron a Télam que parte de la documentación buscada no pudo ser supervisada debido a que, según los representantes del banco, se encontrarían archivados en depósitos de la empresa Iron Mountain.
Al describir la presunta operatoria llevada adelante por la entidad bancaria, una fuente relacionada al caso dijo que la Afip detectó -a partir de investigaciones llevadas adelante- que el HSBC Bank Argentina ofrecía productos «a medida» a empresas que habrían usado facturas truchas.
Con este tipo de accionar la Afip no podía efectuar los controles sobre movimientos del dinero, cerrando de esa forma un potencial circuito que comprendía la emisión de factura apócrifa y al mismo tiempo poder blanquear el dinero.
La fuente precisó que una de las firmas usuaria de esas facturas fue la firma Red de Multiservicios SA, que tomaba las facturas apócrifas para ahuecar la base imponible de Impuesto a las Ganancias y justificar costos.
Esta última empresa pagaba los impuestos a nombre de dos personas físicas, quienes a la vez endosaban los cheques a favor de Mas Distribuidora SA y Recaudaciones y Servicios del Sur SRL.
La fuente recalcó que la cuenta usada por Mas Distribuidora SA para pagar las facturas apócrifas era diferente de la que informó el banco a la Afip respecto de los movimientos de esa firma.
En la presentación judicial realizada por la Afip en marzo del año pasado, la Afip denunció que Mas Distribuidora SA depositó en 6 meses 172 millones de pesos en una cuenta fantasma que el banco facilitó para esta maniobra, mientras las declaraciones juradas de IVA estaban presentadas sin movimiento.
La denuncia también comprenden a la firma Recaudaciones y Servicios del Sur, que habría utilizado para operar 2 cuentas genéricas y 2 cuentas corrientes, y que en un período de seis meses depositaron en esas cuentas 220 millones de pesos que para la Afip no estaban declaradas.
La denuncia de la Afip sostiene que por los 392 millones de pesos que movieron ambas empresas, se debieron haber tributado, por Impuesto a las Ganancias, a los Débitos y créditos y valor agregado (IVA), 224 millones de pesos.
El puntapié inicial de la causa judicial se concretó en abril de 2009, cuando la Afip se constituyó en parte querellante en la causa «Compumar», en trámite ante el juzgado Nacional en lo Penal Tributario N° 1, a cargo del juez López Biscayart.
Por la complejidad de la causa, el juez decidió escindir la investigación formando la causa «Rozuadonsquey», en la que la Afip también interviene como parte querellante desde su inicio.
Con la actuación de Afip en la investigación «Rozuadonsquey» se formaron distintas causas penales para investigar la evasión de otras empresas usuarias de facturas apócrifas.
El año pasado, a principios de febrero, el HSBC fue denunciado por la Afip como integrante de una asociación ilícita ante la Justicia en lo Penal Tributario. La causa es tramitada en el juzgado Penal Tributario N° 3, a cargo de la doctora María Verónica Straccia.