El joven taxista que ayer fue atacado por un grupo de personas que intentaban cometer un atraco, dialogó con el móvil de LT3 desde el sanatorio Mapaci y señaló que “si frenaba me mataban, dispararon a mansalva, a quemarropa, yo escuché cuatro disparos y sentí uno adentro de mi cuerpo; sentí que me moría. Manejé cinco cuadras y no sabía si ir al hospital o a la comisaría”, contó a la vez que explicó que no sabía ni como llegó a la comisaría ya que atravesó unos canteros y que sentía que iban a ser los últimos minutos de su vida.
El hecho tuvo lugar ayer por la noche en Buenos Aires y Battle y Ordoñez, cuando Iván Maggi de 29 años, se encontraba trabajando en un taxi y fue abordado por un grupo de al menos 10 sujetos que lo rodearon e intentaron robarle.
En ese momento, la víctima recibió un disparo en el omóplato. Fue a la comisaría a hacer la denuncia y lo trasladaron al hospital Roque Sáenz Peña. En estos momentos se encuentra en el sanatorio Mapaci esperando ser intervenido quirúrgicamente ya que la bala se alojó finalmente en su cuello.
“Yo creo que es un momento de mucho optimismo y mucho pensar porque sentir la muerte tan cerca es sentir que Dios fue el que me salvó de esa situación y me salvó de estos delincuentes que no tienen escrúpulos”, sostuvo Iván desde el sanatorio.
El taxista, expresó en relación al hecho de inseguridad vivido: “Cada vez hay más delincuentes, evidentemente en Rosario hay algo que está mal, aumentaron los policías, aumentaron los gendarmes y acá en el medio de la calle, en una avenida bien iluminada, te disparan a matar viejo, no fue tirarme un tirito en la rueda, y no fue un arma chica, creo que fue un 38. Me quisieron matar para sacarme 300 pesos”.