El radicalismo comenzó a gestar un encuentro de los principales dirigentes para tomar una determinación respecto al dilema central que tiene hacia 2015: avanzar con los acuerdos provinciales para crecer territorialmente o privilegiar el armado opositor de Unen a nivel nacional.
Según informó la agencia DyN, el diputado y aspirante presidencial Julio Cobos, uno de los más molestos con la reciente foto entre el senador Gerardo Morales y Sergio Massa, dialogó sobre el tema con el jefe partidario y rival interno Ernesto Sanz para resolver el asunto a nivel interno.
La tensión interna volvería a subir esta semana con la visita de Massa a Tucumán, donde avanzaría en una alianza con el diputado radical José Cano que trabaja para derrotar al kirchnerismo en 2015.
El partido tiene prevista una reunión de la Convención Nacional para antes de fin de año, pero la confusión y el malestar anticiparía una reunión más reducida para definir el rumbo partidario. Dentro del partido hay distintas visiones, de acuerdo a los intereses que mantiene cada sector y mientras unos consideran que “Unen está caput”, ante la caída de unos 5 puntos en las encuestas en beneficio de Mauricio Macri, otros apuestan a “aguantar la fortaleza del espacio, al menos hasta la primaria de agosto”.
Dentro del primer grupo figuran los correligionarios que tienen intereses provinciales, quienes aspiran a obtener unas ocho gobernaciones –como la de Jujuy, Catamarca o Tucumán– y dejar la ambición presidencial recién para 2019, cuando se pueda fortalecer una alianza opositora.
Para este sector, es fundamental que las elecciones provinciales sean desdobladas, para poder negociar con libertad, aunque hay provincias como Jujuy que no tienen ese supuesto beneficio y obliga a repensar el plan. Allí, el Frente Renovador comenzó a presionar al radicalismo para que acepte llevar al candidato a gobernador, en este caso Gerardo Morales, para que compita con la boleta presidencial de Unen y también con la opción de Sergio Massa, una alternativa que seguramente no será fácil de consensuar en la centenaria fuerza.
En la vereda contraria están los dirigentes más interesados en el armado nacional, como Sanz y Cobos, que pretenden resolver los cortocircuitos con los aliados del socialismo o el GEN de Margarita Stolbizer hacia 2015.
Desde la conducción nacional reiteraron a esta agencia que “en elecciones desdobladas vale todo, el radical puede arreglar con todo el que se le ocurra” y destacaron que “la buena noticia es que por primera vez tenemos una estrategia de poder que es mucho más que haber ganado una elección”.
En el cobismo, en tanto, también están preocupados por la “puesta en escena” y reclamaron que si existen acuerdos provinciales por afuera de Unen que no se muestren especulaciones sobre un armado nacional.
“Si hay un intendente massista en Jujuy, circunscribirlo a eso, pero no más”, señaló un dirigente de peso en la estructura partidaria, que también cuestionó que la foto entre Morales y Massa se haya producido “48 horas después del lanzamiento de Sanz” en el Luna Park.