Un miembro del equipo de Naciones Unidas (ONU) en Sierra Leona murió por ébola, el tercer trabajador de ese organismo que sucumbe al virus, indicó el lunes un portavoz de la ONU.
El hombre, conductor de la agencia ONU Mujeres, falleció durante el fin de semana y su esposa está recibiendo tratamiento médico, declaró el portavoz, Stephane Dujarric.
«Todas las medidas de protección del personal en la estación de tareas en Sierra Leona están siendo adoptadas de la mejor manera posible bajo las circunstancias actuales», dijo Dujarric.
Un sudanés que trabajaba como agente de salud de la ONU en Liberia murió en Alemania la semana pasada, mientras que un nacional liberiano falleció de ébola el mes pasado.
El peor brote de ébola en el mundo ha matado al menos a 4.500 personas en África Occidental, donde Naciones Unidas está liderando un esfuerzo para hacer retroceder el virus con una afluencia masiva de ayuda.
Un fondo fiduciario de la ONU establecido para proporcionar financiación rápida ante la emergencia generada por el Ébola recibió impulso cuando Australia depositó 8,7 millones de dólares y se realizaron más compromisos de aporte de ayudas.
Chile, Estonia, Finlandia, India, Kazajstán, Nueva Zelanda, Noruega y Rumania también han anunciado contribuciones, con lo que el monto total de las promesas asciende a 43,5 millones de dólares.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, causó revuelo la semana pasada cuando se quejó de tener apenas 100.000 dólares en efectivo en la mano para el fondo y exhortó a las naciones a buscar profundo en sus bolsillos.
El fondo está separado de un pedido de mil millones dólares que la ONU puso en marcha para reforzar la respuesta contra el ébola, de los cuales 433 millones de dólares fueron ya donados.
