En medio de una disputa entre pescadores, una mujer de 37 años fue baleada anteanoche en la zona ribereña de Villa Gobernador Gálvez. De acuerdo con voceros de la investigación, la víctima fue abordada por un muchacho que le disparó en al menos cuatro ocasiones; pero salvó su vida de milagro y, al cierre de esta edición, se encontraba fuera de peligro. Según informaron fuentes de caso, la baleada es pareja y madre de dos pescadores que están presos por un homicidio ocurrido el pasado 5 de julio. Por el ataque, un muchacho era buscado por la Justicia.
El problema arrancó hace rato entre dos familias del barrio de pescadores de Villa Gobernador Gálvez. Según contaron allegados al caso, los vecinos llevan largo tiempo disputándose un sector del río para trabajar y, lejos de ponerse de acuerdo, la cosa parece estar descontrolada.
Si bien fueron varias las veces que tuvieron encontronazos, el sábado 5 de julio todo explotó cuando Juan Antonio A. y su hijo Antonio llegaron hasta un rancho ubicado en Corrientes y la ribera de Villa Gobernador Gálvez. Allí tuvieron una fuerte discusión con Santiago Coronel, de 38 años, y lo balearon; hiriendo también a otro muchacho que lo acompañaba, según fuentes de la investigación. Santiago recibió tres plomos y falleció poco después.
Al día siguiente, los agresores fueron detenidos; el mayor de los acusados quedó imputado de homicidio agravado por el uso de arma de fuego, mientras que su hijo fue encausado por tentativa de homicidio agravado y amenazas coactivas calificadas.
Pero, de acuerdo con voceros del caso, la situación no se calmó. Entre los dos grupos el problema siguió presente. En el barrio aún estaba Gladys M., de 37 años, mujer de Juan Antonio y madre de Antonio. Ella fue hostigada en numerosas ocasiones durante los últimos meses por allegados a Santiago Coronel; incluso un investigador aseguró que la mujer “vivía refugiada desde entonces, por temor a que la mataran”.
Por ello para los pesquisas no fue extraño cuando durante la noche del miércoles, aproximadamente a las 22, ingresó un llamado en la comisaría 25ª de Pueblo Nuevo avisando que habían baleado a una mujer. Cuando uniformados de la Unidad Regional II se presentaron en Corrientes y la ribera del Paraná, confirmaron sus sospechas. Un muchacho aprovechó un instante en el que Gladys salió de su casa y le dio cuatro tiros, uno de ellos en el cuello.
La víctima fue trasladada por un móvil del Sies hasta el hospital Gamen, donde los médicos la atendieron y salvaron su vida. Si bien Gladys debió quedar internada en el hospital, un vocero del caso aseguró que ayer por la tarde ya se encontraba fuera de peligro.
“Estamos ante una situación límite. Ninguna de las dos familias va a abandonar el barrio, ni la zona de pesca. Es posible que esto no termine acá”, explicó un investigador a El Ciudadano.
De acuerdo con fuentes del caso, al cierre de esta edición, un muchacho era buscado por uniformados de la UR II, acusado de intentar matar a Gladys M., de 37 años.
El caso es investigado por la Fiscalía de Homicidios Dolosos, a cargo de Florentino Malaponte durante esta semana.