El último sábado el club Talleres de Villa Gobernador Gálvez fue escenario de una nueva velada de boxeo profesional que fue televisada por TyC Sports. La pelea central de la noche dejó el triunfo por puntos, en decisión unánime de los jurados, de Jonathan Víctor Barros (58,900) ante Sergio Javier Escobar (58,900). Con esta victoria, Barros se adjudicó el título latino CMB superpluma que estaba vacante.
El combate fue deslucido, aburrido, sin situaciones que entusiasmaran al público.
“Señores… trabajan o se van”, fueron las palabras que el arbitro Diego Linari, promediando el quinto round, les dijo a los boxeadores en un momento del combate; algo que marcó y graficó con total elocuencia la escasa vocación de pelear de ambos.
Sin dudas, una pelea que llegó en medio de comentarios relacionados a encontrar elementos y/o justificativos que reglamentariamente permitieron que se realizara. Es que las autoridades del Consejo actuaron con flexibilidad a la hora de analizar los antecedentes, pero con argumentos sólidos para autorizarla. Se trataba de un enfrentamiento por una corona vacante entre un ex campeón mundial (Barros) y el actual campeón argentino de la categoría (Escobar). Es cierto también que Escobar venía de tres derrotas consecutivas y con 23 perdidas sobre 52 presentaciones rentadas.
No obstante la aclaración reglamentaria, nada de esto invalida la propuesta que una vez en combate presenta cada boxeador.
Jonathan Barros, el mendocino que fuera campeón mundial cuando ganó el cinturón vacante pluma el 4 de diciembre de 2010 al noquear técnicamente en siete rounds al panameño Irving Berry y lo resignara ante Celestino “Pelenchín” Caballero en el Luna Park el 14 de octubre de 2011, era quien tenía la mayor responsabilidad de la noche.
Lo mencionado anteriormente, más su decisión de volver a los primeros planos en busca de recuperar el título perdido, colocaron todas las miradas e interrogantes sobre su actuación. Barros volvió al ring luego de ocho meses de inactividad (última pelea en la FAB el 8 de febrero de 2014, victoria por nocaut en el primer round ante el brasileño Cid Edison Bispo Ribeiro), luciendo un desempeño pálido, falto de ideas y confundiendo los mecanismo de precaución con los de indecisión.
El mendocino, ante un Escobar fiel a su condición de boxeador de escasos recursos, no supo en ningún momento imponer su mayor caudal técnico, su experiencia y mucho menos su estrategia ofensiva. A tal punto que en algún pasaje se planteó entre quienes estaba en Talleres: “¿Tiene algún plan… alguna estrategia preparada?”.
Es que se lo vio falto de distancia, irresoluto a la hora de aprovechar algunos pasajes de clara superioridad para definir; sin convicciones en momentos de tomar el control de la pelea y con poco rodaje boxístico.
Sergio Escobar, el tandilense guerrero de más de 50 batallas, sólo aspiraba llegar al final parado y lo menos golpeado posible.
Los diez capítulos se sucedieron de igual manera. Sin emociones. Sin cambios de actitud de los peleadores. Sin cruces o choques que levantaran el voltaje de la noche.
No obstante, tan escasos fueron los recursos de Escobar, que con lo poco que mostró Barros le alcanzó para lograr una victoria tan indiscutida como amplia.
Así, Jonathan Víctor “Yoni” Barros es el flamante campeón latino CMB de los superplumas y a través de este importante logro, vuelve a colocarse en un lugar de expectativa favorable en los niveles mundiales. Claro está que de lograr una nueva chance mundialista, el mendocino tendrá que mejorar no sólo en enormes proporciones su trabajo, sino volver a nutrirse del temperamento y alma de combate que un boxeador necesita para encarar desafíos de esa magnitud. Mentalizarse que para lograr el título mundial deberá mejorar muchísimo con respecto a lo que ofreció el último sábado.
Las tarjetas de los jurados fueron las siguientes: 100-90; 100-90 y 99-91. La de El Hincha: 99-91 para Jonathan Barros.
Por otra parte, en el semifondo Jonathan Gastón Chávez (63,600) derrotó por puntos a Claudio Alberto Esperante (63,700); el cordobés Sergio Manuel Liendo (60,700) venció por puntos al rosarino Jonathan Joel Casafu (60,400); el bonaerense Marcos Barroca (78,500) le ganó por puntos y le quitó el invicto a Juan Ezequiel Basualdo (76,500); mientras que en la primera campana de la noche, Adela Celeste del Carmen Peralta (66,600) derrotó por puntos a la santafesina Cristina Cuevas (66,150).