El pedido elevado por el Sindicato de Trabajadores Municipales de Rosario para la reapertura de la mesa paritaria con el Ejecutivo encendió la discusión en el Concejo, desde donde rechazaron de plano que esta cuestión esté sujeta a la aprobación del Presupuesto 2015, como aclaró la secretaria de Hacienda local, Verónica Irízar. Asimismo, luego de adelantar que el plan de previsión de gastos, que ingresaría al recinto el jueves 13 de noviembre, incluirá una actualización de la Tasa General de Inmuebles (TGI), desde el oficialismo en el Palacio Vasallo plantearon volver a tratar una opción que a fines del año pasado generó rispidez entre los bloques: el revalúo catastral.
El debate se inició luego de que desde el gremio de municipales exigieran el inmediato llamado a paritarias y se encontraran con que el municipio supeditará cualquier resolución de este tipo a la discusión de sus propios recursos y del presupuesto. “Pensamos que no hace falta en este caso. Eso lo único que busca es enfrentar a los municipales con los vecinos”, evaluó el gremialista Antonio Ratner, para quien el análisis de un nuevo aumento salarial para su sector más allá del concedido para todo el año no debe prolongarse más de la próxima semana (recuadro).
En igual dirección, el concejal radical Sebastián Chale, integrante de la comisión de Presupuesto y Hacienda del Concejo Municipal, consideró desafortunadas las declaraciones de Irízar ya que “ligar una cosa con otra suena extorsivo”. De este modo, opinó que “la negociación con el gremio tiene que ver con una instancia de debate en paritarias” y que, si bien se tendrán en cuenta los aumentos salariales y las partidas para obras de la ciudad, los dichos tuvieron como objetivo “trasladar algo de presión” a los ediles.
Por su parte, la presidenta de la mencionada comisión de trabajo, Daniela León, confirmó que los concejales que integran el Frente Progresista Cívico y Social (FPCyS) se reunirán la próxima semana para conocer más detalles de la pauta presupuestaria que, según adelantaron, variará en un 39 por ciento respecto al año pasado e incluirá una actualización de la TGI. Respecto a esto último, la legisladora dijo: “Es absolutamente correcto porque venimos con un desfase que no permite sostener los servicios que por ley debe cubrir. Las estimaciones hablan de una inflación del 40 por ciento y en el 2014 sólo ingresamos un aumento muy por debajo de esa cifra”.
Si bien León evitó abundar en números y porcentajes, mencionó la propuesta del revalúo que a fines de 2013 motivó una fuerte discusión entre oficialismo y oposición en el Concejo. Esta metodología, calificada como más equitativa por la propia edila, apunta a incrementar lo que el municipio percibe de parte de los habitantes de zonas en las que se hayan observado cambios significativos en materia de urbanización. El revalúo se calcula a partir de la cotización del valor del terreno y de la propiedad, modificada por variables como calidad constructiva, ubicación y calle y altura de la calle donde desemboca el terreno, entre otras.
“Está en tratamiento en el Concejo. En aquel entonces la propuesta era el aumento de la TGI a través del revalúo y no de la alícuota. Esto es más equitativo que aprobar una suba igual para todos”, amplió, recordando que esta modalidad “ya se aprobó en 2008 y 2009”.
La visión es compartida a medias por Chale para quien la propuesta presentada en 2013 implicaba “un incremento demasiado elevado para los vecinos”, quienes, a su criterio, deben pagar un impuesto que establezca cierta sintonía con los servicios que reciben por parte de la Municipalidad.
“Si cuento con todos los servicios, como iluminación, cloacas y pavimentación definitiva debo pagar más que el que no los tenga. Ello representa un doble beneficio: primero para el vecino y segundo porque sirve como un incentivo para que el municipio avance en obras para poder recaudar más”, explicó haciendo referencia a un proyecto ingresado por su sector al tiempo que deslizó la idea de realizar una nueva división de la ciudad en mayor cantidad de radios, iniciativa que “sí aportaría más igualdad”.
Municipales ponen plazos
El secretario general del Sindicato de Trabajadores Municipales de Rosario, Antonio Ratner, se mostró entusiasmado luego de la reunión mantenida a fines de la semana pasada con los principales representantes comunales de la provincia para convocar otra vez a una mesa paritaria y llegar a un nuevo acuerdo salarial, aunque pidió primero aguardar a que se defina el acuerdo entre el gobierno provincial y sus trabajadores. “Creemos que no va haber inconvenientes. Hay predisposición y voluntad, pero primero hay que ver cuál es el arreglo de la provincia, que va a ser clave”, dijo.
A pesar del optimismo previo, el gremialista evitó brindar detalles acerca de la mejora salarial esperada por su sector para evitar condicionamientos al momento de reunirse, aunque aclaró que obviamente estará en sintonía con la inflación, que de acuerdo a las predicciones de algunos sectores podría llegar al 40 por ciento. De este modo, pidió concretar una reunión en la que se aborde íntegramente la situación económica de los trabajadores del sector ya que de nada sirve sentarse a discutir un bono a fin de año y volver a juntarse a comienzos de año para definir la cuestión paritaria.
“La semana que viene tenemos que estar reunidos en paritarias. Sabemos que no es fácil juntar a 363 presidentes comunales de toda la provincia pero necesitamos resolver esta cuestión. En caso de que no haya un llamado convocaremos a otra reunión y tomaremos una decisión”, concluyó Ratner.