El cese de comercialización de productos agropecuarios convocado por tres entidades de la Mesa de Enlace se realizará entre miércoles y el viernes, mientras el Gobierno y la Federación Agraria fustigaron la medida.
La Sociedad Rural Argentina (SRA), Coninagro y Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), integrantes de la Comisión de Enlace de Entidades Agropecuarias, motorizan la medida que contempla el cese de comercialización de hacienda en pie y granos, mientras que con la modalidad que decidan, se plegarán las economías regionales y la lechería.
La medida se enmarca dentro de las acciones gremiales que las entidades rurales «vienen anunciando en rechazo a las políticas agropecuarias que el gobierno nacional lleva adelante y que han provocado una situación crítica para todos los sectores productivos del país», indicaron en un comunicado.
Consideraron que «a raíz de una sostenida inflación, una asfixiante presión fiscal y trabas a la comercialización (ROES), se degradó por completo la competitividad de la producción agropecuaria».
Por su parte, el presidente de Coninagro, Egidio Mailland, dijo a NA que «por la situación crítica de los productores, el cese de comercialización interpreta la voz de protesta de todo el campo argentino, no sólo de la Pampa Húmeda sino también de las economías regionales que lo están pasando mal y nadie los escucha».
En tanto, el ex presidente de Federación Agraria Argentina (FAA) y candidato a gobernador por el Frente Renovador en Santa Fe, Eduardo Buzzi, dijo a NA que aún cuando su entidad no adhiera, «muchísimas bases van a ir al paro igual porque hay mucho resentimiento y productores endeudados».
«La cosecha de soja estará en unos días y los productores la van a terminar regalando», advirtió al considerar que la «segmentación de retenciones que negocia la FAA con el gobierno terminará saliendo tarde porque los chicos van a vender».
Para la Mesa de Enlace, el «Gobierno debe revertir de inmediato las políticas que provocaron gravísimos problemas para el campo, como también para todo el interior del país y la economía en su conjunto. También insistimos en la necesidad de que se transparente el funcionamiento de los mercados».
Omar Príncipe, presidente de FAA, ratificó que no adhieren al cese de comercialización de 72 horas pero también aclaró que los pequeños y medianos productores agropecuarios requieren que se fragmente la estructura de retenciones a la exportación para mejorar sus ingresos ante el aumento de costos.
Y también sugirió que de no tocarse las retenciones se podría avanzar en un «cambio del mínimo no imponible» del impuesto a las Ganancias, para diferenciarlos tributariamente de los grandes operadores del sector.
Por su parte, el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández estuvo de acuerdo con la posición de FAA de no sumarse al cese de comercialización y habló de mirar qué sucede con Coninagro que, según su criterio, no es tan afín a la Mesa de Enlace.
Mailland salió al cruce y expresó que «Coninagro está en la Mesa de Enlace y seguirá estando» aún cuando es respetuosa de la decisión de otras entidades.
Por su parte, el gobernador de Entre Ríos y precandidato a presidente por el Frente para la Victoria, Sergio Urribarri, se manifestó contrario a las medidas de fuerza propuestas por las tres entidades de la Comisión de Enlace.
En una visita a San Juan, sostuvo que «el objetivo de los patrones del campo es inverso al de la mayoría de los argentinos; en este proyecto nacional estamos discutiendo la distribución de la renta y la asignación de recursos».
«Lo que pretenden los patrones de la dividida Mesa de Enlace es generar la zozobra de la población como lo hicieron en el 2008, cortando la cadena de abastecimiento en busca del caos que necesitan para intentar voltear al Gobierno, pero no lo van a conseguir», manifestó.