En un nuevo aniversario del ataque a la Embajada de Israel, el ministro de Agricultura de ese país, Yair Shamir, sostuvo que el fiscal Alberto Nisman «pagó con su vida el intento de llegar a la verdad» en la causa Amia, y dijo que los responsables del atentado «fueron financiados y entrenados por Irán».
Al brindar su discurso en el acto oficial frente al jefe de Gabinete, Aníbal Fernandez, y el ministro de Justicia, Julio Alak, el funcionario israelí sostuvo que «los terroristas del atentado han sido financiados y entrenados por Irán con odio ciego y demencial» y dijo que ambos ataques «tienen que ser investigados sin descanso para llevar a sus perpetradores a la justicia».
«Los viles terroristas perpetradores del atentado han sido apoyados y financiados por Irán», sostuvo y agregó que «Irán continua sembrando temor en todo el mundo», por lo que hizo un llamado a la comunidad internacional «a unirse en una lucha común contra el terror», ya que «si permanecemos de brazos cruzados, será el fin del mundo civilizado».
El ministro recordó a las 29 víctimas fatales del ataque, observó que «dos años después los asesinos volvieron a golpear» en la Amia, causando otros 85 muertos, y agregó que «lamentablemente» este año ocurrió otra «tragedia», por la muerte de Nisman, y completó: «Pagó con su vida el intento de llegar a la verdad».
Con el tradicional sonido de las sirenas, empezó a las 14.45 el acto del aniversario número 23 del atentado a la Embajada de Israel, con la presencia de funcionarios del Gobierno nacional y dirigentes de la oposición.
Por el Gobierno nacional participaron Fernández y Alak, que fueron blanco de algunos abucheos y silbidos: cuando fueron mencionados por micrófono, desde detrás del vallado les gritaron «el Gobierno también es responsable»; «corruptos»; «vergüenza nacional» y «antisemitas».
«No le presto atención a eso», sostuvo Fernández al ser abordado luego por los periodistas.
Mientras, por el Gobierno porteño asistieron el jefe de Gabinete, Horacio Rodríguez Larreta, y el ministro Hernán Lombardi, además del senador radical Ernesto Sanz y el presidente del Instituto Cultural de Buenos Aires, Jorge Telerman.
«La impunidad se ha vuelto un sordo dolor que me reclama y pide Justicia», afirmó a su vez el sobreviviente Jorge Cohen, el primero en tomar la palabra en el acto que se realizó en la intersección de las calles Arroyo y Suipacha.
Por su parte, la embajadora Dorit Shavit remarcó que «el Estado de Israel confía en la Argentina y en continuar con la investigación del atentado» y agregó: «Quienes planearon el atentado se pasean libremente. Todos podemos ser las víctimas del terror mañana».
