Sin un lugar donde amarrar en la costa rosarina y con el argumento de un incremento importante en los costos laborales, peligra la continuidad del Barco Ciudad de Rosario.
La titular de la emblemática embarcación, Haydée Oficialdegui, se reunió ayer con integrantes de la comisión de Producción del Concejo Municipal, tal como lo hizo hace seis meses (ver aparte), donde planteó el difícil panorama que atraviesa el negocio de paseos regulares por el Paraná con fines recreativos y turísticos. Allí, la empresaria recordó que en octubre del año pasado solicitó volver al amarradero –la ex dársena de cabotaje– que fue utilizado por 29 años y del que tuvieron que irse al concesionarse la Estación Fluvial sin ninguna respuesta.
El presidente de la comisión, Martín Rosúa, contó que el barco estuvo mucho tiempo amarrando en un lugar que estaba entre la Estación Fluvial y la guardería Centro.
“Después, por razones que no son claras, tuvo que irse y actualmente tiene la embarcación en la isla. Lo que nosotros tenemos que averiguar, y lo estamos haciendo, es si ese lugar es jurisdicción de la Subsecretaría de Puertos y Vías Navegables, del Enapro o de la Municipalidad. En caso de pertenecer al municipio nosotros comenzaríamos a actuar para que pueda volver a usarlo. Lo que ocurre hasta el
momento es que es un sitio de jurisdicción dudosa”, aclaró.
“Lo que ella plantea es que peligra la continuidad del emprendimiento porque además los costos laborales le aumentaron muchísimo. Por ejemplo, los mozos se tuvieron que pasar al sindicato de marineros, con el incremento salarial que esto significa. También está la cuestión de amarrar en la isla, lo que le trae muchos más gastos, principalmente logísticos”, remarcó.
Durante el encuentro, Oficialdegui contó que perdieron “un segundo barco para salvar económicamente el primero”. “Tuvimos problemas económicos con el sindicato de marineros y nunca solicitamos un subsidio. Hemos hecho viajes gratis para la comunidad”, recordó.
Así las cosas, en caso de ser jurisdicción de la Municipalidad el lugar de amarre, los ediles se comprometieron a avanzar con un proyecto presentado en su oportunidad por el concejal Miguel Zamarini que solicita que se le otorgue un permiso de uso precario para el derecho de fondeo del barco Ciudad de Rosario en el sector conocido como ex dársena de cabotaje, ubicado sobre el espejo de agua al sur/sudeste de la estación Fluvial de Rosario y frente a la guardería Centro.
En sus artículos 2 y 3, el mencionado decreto solicita que el permiso tenga un plazo de 10 años, prorrogable por el Concejo por otros 10 años. Además, compromete a la propietaria de la embarcación a hacer los arreglos correspondientes en el sector de amarras.
Atado a un árbol
La actual situación del Barco Ciudad de Rosario no muestra avances desde fines de octubre del año pasado. En una crónica de esa fecha, este diario daba a conocer la existencia de una reunión entre los propietarios de la embarcación e integrantes de la comisión de Producción del Concejo Municipal y se informaba que la misma estaba amarrada a un árbol en la zona de islas frente a Rosario. Allí el planteo fue idéntico al actual, ya que los titulares solicitaron poder amarrar en la costa de la ciudad –entre La Fluvial y la guardería Centro– y los ediles se comprometieron a averiguar quién tenía jurisdicción allí.