Uno de los médicos que revisó al portero Jorge Mangeri la noche en que quedó detenido por el crimen de la adolescente Ágeles Rawson admitió la posibilidad de que las lesiones que presentaba en su cuerpo hubieran sido infligidas para ocultar otras heridas preexistentes.
El perito médico Alfredo Sapag, quien fue convocado por la fiscal Paula Asaro para revisar a Mangeri a raíz de su denuncia sobre supuestos apremios ilegales que le habían propinado policías, habló sobre “heridas modificadas” en el cuerpo del portero.
Sapag, jefe de la División de Medicina Legal de la Policía Federal, revisó a Mangeri junto con otros tres médicos la noche/madrugada en que declaró ante la fiscalía. “Eran lesiones complejas, y una gran cantidad”, explicó el médico cuando el tribunal oral que lleva adelante el juicio lo interrogó sobre el cariz de los daños que había observado en Mangeri.
Entonces el defensor de Mangeri, Adrián Tenca, avanzó: «¿Se produjo una lesión para ocultar otra?». “Puede ser», respondió. Las lesiones «estaban modificadas con una sustancia cáustica o que produce calor», describió Sapag.
Una de las hipótesis de la acusación indica que las lesiones originales de Mangeri fueron causadas por Ángeles Rawson defendiéndose del ataque sexual, y luego intentó disimularlas con sustancias corrosivas para ocultarlas.
