El presidente ruso, Vladimir Putin, y el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, mantuvieron ayer discusiones “francas” sobre Ucrania, Siria e Irán, en la primera visita del diplomático a Rusia en dos años, en busca de un deshielo tras meses de tensiones reminiscentes de la Guerra Fría.
El jefe de la diplomacia estadounidense se reunió primero con su par ruso Serguei Lavrov durante cuatro horas en Sochi, antes de ser recibido por Putin durante otras dos horas y media en su residencia veraniega en esa ciudad a orillas del mar Negro, en el primer viaje de Kerry a Rusia desde el inicio de la crisis en Ucrania.
Kerry y Putin sonrieron y se dieron la mano amablemente antes de sentarse a ambos lados de una mesa, cada uno de ellos junto a un grupo de colaboradores.
Según escribió el norteamericano en su cuenta de Twitter, mantuvo “conversaciones francas” con Putin y Lavrov sobre los tres principales temas internacionales de la agenda bilateral: las negociaciones nucleares con Irán, la profundización del conflicto separatista en Ucrania y la interminable y cada vez más compleja guerra civil en Siria.
Por su parte, Lavrov coincidió en que “ambos países tienen una especial responsabilidad por la seguridad y estabilidad global”, pero destacó que “la instigación de la confrontación y los intentos de presión por medio de sanciones (sobre Rusia) son un callejón sin salida”, según un comunicado difundido por la Cancillería rusa. “No se logrará que Rusia renuncie a sus intereses nacionales y a sus posturas de principio en cuestiones vitales”, concluyó el texto.
Durante el primer encuentro de la jornada, Lavrov le transmitió el mismo duro mensaje a su par estadounidense, pero lo hizo con un gesto teñido de distensión tras un período de frialdad diplomática. “Lavrov le regaló a Kerry unos tomates de (la región rusa de) Krasnodar y unas papas que son familiares lejanos de aquellas que en su momento le dio su colega norteamericano”, contó una vocera de la Cancillería rusa. El anfitrión explicó que las papas eran parte de una nueva y mayor producción nacional, gracias a las sanciones económicas de Occidente.
Hollande visitó a Fidel
El diario oficial Granma publicó ayer cinco fotos del presidente de Francia, François Hollande, y el ex mandatario cubano Fidel Castro conversando animadamente, y relató que el encuentro entre ambos anteayer en La Habana fue cordial y amistoso. Hollande terminó ayer una visita oficial a Cuba de poco más de 24 horas en cuyo transcurso también se reunió con su par local, Raúl Castro, y pidió públicamente el levantamiento del embargo de medio siglo de Estados Unidos a la isla. Granma dijo que el visitante y Castro “sostuvieron un interesante diálogo acerca de los lazos históricos entre Cuba y Francia, así como pasaron revista a importantes temas del acontecer internacional e intercambiaron acerca de sus complejidades y retos.
