La cúpula y tres empleados policiales de la subcomisaría 13ª de General Lagos fueron pasados a disponibilidad por orden del secretario de Seguridad Pública, Gerardo Chaumont. La medida se concretó para llevar adelante un sumario a fin de determinar la responsabilidad administrativa de los uniformados en el copamiento y robo de armamento que sufrió la dependencia y que, a su vez, posibilitó el asalto al banco Credicoop de dicha localidad.
El copamiento de la seccional que permitió el asalto al banco ocurrió minutos antes de las 7 de anteayer, cuando dos asaltantes irrumpieron en la subcomisaría 13ª, ubicada en San Martín al 100. La dupla se encontró con poca resistencia ya que sólo había una sargento de 40 años. Sus dos compañeros se habían retirado minutos antes del relevo, que se tenía que realizar a las 8, dijo una fuente del caso. La mujer, tras ser reducida, quedó desarmada y maniatada con alambre en una de las oficinas mientras los asaltantes tomaban dos pistolas reglamentarias, dos escopetas 12.70, tres chalecos antibala y una ametralladora FMK3 que había en la seccional. Con el miniarsenal, el dúo se subió al único patrullero y fue hasta la sede del Credicoop, en San Martín al 600. Un tercero se quedó en la puerta de la dependencia.
Mientras tanto, a las 7 de anteayer el tesorero bajó de su auto tranquilo ya que vio al Chevrolet Meriva negro del custodio y el móvil de la subcomisaría 13ª en la puerta, pero a los pocos pasos fue interceptado por los falsos policías. El custodio del Meriva quiso ir hasta donde estaba el tesorero para ver qué pasaba, pero un cuarto asaltante le cortó el paso, lo encañonó y se sentó junto con él. Sin mediar palabra, los ladrones obligaron al tesorero a cargar en unos bolsos la plata chica que había en la línea de caja, mientras reducían y maniataban a otros dos empleados recién llegados. Una vez que tuvieron en su poder, el botín, unos 80 mil pesos, salieron del banco, se unieron a un quinto cómplice que estaba en las inmediaciones y fugaron en la patrulla, que fue hallada luego en Pueblo Esther, y en otro auto.
Investigación administrativa
Según fuentes del Ejecutivo, el personal de la Dirección de Asuntos Internos de la Secretaría de Control del Ministerio de Seguridad lleva adelante el sumario para determinar: por qué dos suboficiales dejaron sola a su compañera y se retiraron entre las 6.30 y las 6.45 de la subcomisaría cuando el relevo llegaba a las 8 de la mañana, y también se analiza cuáles eran las medidas de seguridad que tenían las armas y los chalecos en la dependencia.
Por este último hecho, se pasó a disponibilidad al jefe y la subjefa de la seccional. En tanto, a la sargento de 40 el sumario administrativo se le abrió por el hecho de que los asaltantes le sacaron su arma reglamentaria.
“Tomamos la decisión de poner en disponibilidad, no porque lo consideremos culpables o no, sino porque, frente a este tipo de hecho institucional, el pase se realiza para iniciar una investigación. Esta va a determinar si hubo negligencia, por acción u omisión, si se respetaron los protocolos”, explicó Chaumont, quien agregó en declaraciones a LT3 que, “evidentemente, los delincuentes sabían que allí habría escaso personal y obraron con una tarea previa de inteligencia”.