La Cámara de Apelación en lo Penal confirmó el procesamiento contra el ex juez Alejandro Pedro Martín –quien estuvo a cargo del Juzgado Civil y Comercial de la 17ª nominación– y también para Ricardo Lavaca, quien fue secretario de dicha dependencia. De este modo, ambos serán enjuiciados por una presunta estafa con fondos judiciales del Banco Municipal, cuya cifra se estima que ronda el millón de pesos. Una medida judicial similar alcanzó también al martillero Oscar Kovalevski, según lo determinaron los jueces Guillermo Llaudet Maza, Otto Crippa García y Georgina Depetris. En tanto, fue revocada la falta de mérito dictada en primera instancia por la magistrada Mónica Lamperti para el empleado de la entidad financiera Tomás Martínez Echenique.
Las irregularidades fueron denunciadas por los abogados del mismo Banco Municipal, lo que derivó en la destitución de Martín y Lavaca de sus cargos, en 2013, por decisión de la Corte Suprema de Justicia de la provincia. A su vez, la gravedad del hecho derivó en una investigación que recayó en el Juzgado de Instrucción de la 12ª nominación, a cargo de Lamperti, quien dictó el procesamiento del ex juez por prevaricato y malversación de fondos públicos, entre otros, aunque en la ocasión la magistrada rechazó el pedido de la Fiscalía que pidió imputar a Martín como “jefe de la asociación ilícita”.
Algo de alivio
En este sentido, Carlos Edwards, uno de los abogados del ex juez, explicó ayer que el hecho de que se lo procese como miembro y no como jefe de la asociación ilícita a su defendido implica un alivio para la situación procesal de Martín.
En cuanto a la revocación de la Cámara sobre la falta de mérito dictada por Lamperti para Martínez Echenique, fuentes vinculadas a la causa consideraron que “es una decisión que hace que el Banco Municipal siga ligado al proceso judicial”. Cabe recordar que el empleado fue sindicado como el responsable de facilitar el detalle de las cuentas, tanto al ex juez como al resto de la organización.
El escándalo
La presunta estafa tomó estado público hace aproximadamente tres años cuando se conoció que desde el juzgado en donde se desempeñaba Martín se habían librado 56 oficios de cobro por un valor de más de un millón de pesos que pertenecían a distintas cuentas de otras sedes judiciales que se encontraban bajo custodia en el Banco Municipal. Según determinó la investigación llevada adelante oportunamente por Lamperti, buena parte de la cifra faltante quedó en manos de tres abogados y un martillero público, quienes recibieron el dinero a través de pagos librados por la entidad financiera.
Tal como consta en la causa, el mentor del grupo era el martillero Kovalevski, quien operaba junto con los abogados Jorge Heter y Luciano García Montagno. No obstante, estos dos profesionales involucrados ya recibieron condena en un juicio abreviado y devolvieron parte del dinero.
La causa, sin precedentes en el ámbito de los Tribunales provinciales de Rosario, involucró a funcionarios del Poder Judicial, un empleado bancario, un martillero y dos abogados que llevaron adelante juicios ejecutivos falsos y mediante maniobras fraudulentas libraron 56 oficios de cobro por un monto de 1.050.000 pesos.