A partir de la 6 de la mañana los móviles de Gendarmería comenzaron a patrullar las calles de la ciudad. Así, arrancó el operativo refuerzo de seguridad que se acordó con el gobierno nacional tras la llegada de 600 efectivos.
Los gendarmes estarán distribuidos en los principales accesos y en los barrios ya asignados. Allí se realizarán megaoperativos de saturación. Además, en las principales calles se realizarán controles de documentación vehicular.
Algunos de los barrios ya asignados son Villa Banana, La Tablada, Las Flores y La Cerámica. Luego, se extenderán a barrio Ludueña, Santa Lucía, La Bombacha, Fisherton, Pichincha, Echesortu, Belgrano y Alberdi.
Los gendarmes estarán acompañados por 1.200 policías provinciales, quienes realizarán los controles en conjunto.